Dieta baja en histamina

Dieta baja en histamina

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Si sufres alguna alergia, la palabra histamina seguramente te resulte familiar. La histamina es una sustancia imprescindible para el buen funcionamiento del organismo, pero cuando se genera en exceso debido a una reacción alérgica o se acumula porque el cuerpo no puede eliminarla, produce inflamación y una serie de molestias. 

 

Qué es la histamina

La histamina es una amina que el cuerpo sintetiza a partir del aminoácido histidina, que conseguimos de los alimentos.

Las principales células que llevan a cabo la fabricación de histamina son los mastocitos y los basófilos, que la almacenan en su interior. También forman histamina neuronas del hipotálamo, el estómago y el tejido conectivo.

Cumple con importantes funciones: 

  • Es un neurotransmisor que prolonga el estado de vigilia y reduce el sueño, actuando de forma opuesta a la melatonina (por eso los medicamentos antihistamínicos dan sueño). 
  • En el sistema digestivo, estimula la producción de ácidos estomacales necesarios para digerir e interviene en el control del apetito. 
  • Pero la histamina, ante todo, regula los procesos inflamatorios, permite la reparación de tejidos que han sufrido agresiones y facilita la acción de las células inmunitarias contra agentes patógenos.

Histamina alta o intolerancia a la histamina

Una vez cumplida su función, la histamina se degrada en el hígado gracias a la enzima diamino oxidasa (DAO), que descompone la histamina de los alimentos. Si, por la razón que sea, no se fabrica en suficiente cantidad, se produce un exceso de histamina en el organismo.

Cuando esto ocurre puede haber síntomas parecidos a los de una alergia, pero con la diferencia de que en este caso no tiene relación con una respuesta inmunitaria (no está medida por los anticuerpos IgE, como ocurre en la alergia). En estos casos se considera entonces que hay una intolerancia a la histamina

Un sistema digestivo sano fabrica suficiente enzima DAO, pero si se padece una infección por parásitos o virus, o un desequilibrio en la mucosa digestiva o en la microbiota, nuestro intestino puede dejar de fabricar esta enzima, lo que favorece la acumulación de histamina y genera problemas.

La histaminosis o exceso de histamina no es una enfermedad, sino un conjunto de síntomas que pueden ser muy diversos, como migrañas y dolores de cabeza, contracturas musculares, picores, rosácea, ronchas, piel atópica, molestias digestivas como gases, diarrea o estreñimiento, dolores menstruales y alteraciones del ciclo, caída del pelo o infertilidad.

Cómo eliminar la histamina del cuerpo

Para revertir el exceso de histamina en el cuerpo y los síntomas que provoca, hay que asegurarse de que no se sufre una infección por parásitos o virus en el intestino. En ese caso habría que tratarla y luego empezar a regenerar la pared intestinal, la mucosa y la microbiota para que la producción de DAO llegue a ser la óptima.

Cuando los análisis revelen niveles insuficientes de la enzima DAO en sangre o los síntomas indiquen un exceso de histamina, es necesario pautar una dieta baja en histamina.

La eliminación de la histamina del cuerpo se compone, así, de tres fases:

  • En una primera fase, además de retirar los alimentos ricos en histamina y los que favorecen su formación, puede ser necesario prescribir un suplemento de DAO.  
  • En una segunda fase, el intestino ha empezado a regenerarse y la sintomatología se reduce, pero aún hay que ir con cuidado y es imprescindible empezar la reintroducción de alimentos de forma muy progresiva y siempre en pequeñas cantidades. 
  • En la tercera fase del proceso, el paciente ha mejorado significativamente, por lo que tiene cada vez más margen para añadir alimentos diferentes y no necesita un suplemento de DAO.  

Veamos ahora cómo sería esa dieta baja en histamina de la primera fase, que iría suavizándose en la segunda fase.

Dieta baja en histamina

Para seguir una dieta baja en histamina primero hay que eliminar o  reducir los alimentos con histamina o que favorecen su producción durante un periodo más o menos largo de tiempo.

Es importante tener en cuenta que esta dieta limitada no se puede sostener a largo plazo, ya que es demasiado restrictiva. El tratamiento para mejorar la histaminosis se debe hacer bajo supervisión de un nutricionista para asegurarse de que no habrá déficits de nutrientes y que se siguen determinadas fases en la evolución del tratamiento. 

1. Alimentos con histamina a evitar

Entre los alimentos a evitar por ser alimentos con histamina o que inducen al cuerpo a producir más histamina destacan: 

  • Fermentados (chucrut, pickles de verduras, kimchi, kombucha).
  • Pescado azul y marisco, sobre todo en conserva.
  • Productos ultraprocesados
  • Carnes y embutidos.
  • Productos lácteos, sobre todo los quesos curados.
  • Vino y cerveza.
  • Elaborados con trigo.
  • Azúcares
  • Garbanzos, soja o alubias
  • Cítricos.
  • Espinacas y solanáceas (tomate, berenjena, pimiento y patata).
  • Pistachos, nueces y almendras

En general, conviene también evitar o reducir al mínimo el consumo de alimentos que lleven tiempo almacenados.

2. Alimentos que sí debe incluir una dieta para eliminar histamina

Algunos alimentos no solo no contienen histamina o son bajos en ella sino que incluso pueden ayudar a eliminarla o a cuidar del intestino como se requiere en este momento:

  • Los vegetales frescos que refuerzan la microbiota intestinal deben situarse en la base de la dieta.  
  • Son recomendables las cocciones sencillas (al vapor o en agua durante pocos minutos).
  • Serán bienvenidos en nuestro día a día manzanas, peras, uvas, higos, coco o mango
  • Toda la familia de las crucíferas (coles, rúcula, nabos, rábanos, mostaza) está indicada. 
  • Están permitidos los calabacines, calabazas, hinojo, zanahoria, cebolla y puerros
  • En cuanto a legumbres, se toleran bien las lentejas o los azukis.
  • Las nueces de Brasil, los anacardos y las macadamias son aptos en una dieta baja en histamina. 

3. Ayudar al hígado

Diversos estudios han podido demostrar que el exceso de estrógenos y el exceso de histamina están relacionados y se retroalimentan. 

El exceso de estrógenos causa miomas, mamas fibrosas, endometriosis, sueño poco profundo, retención de líquidos, síndrome premenstrual, contracturas musculares, falta de libido y exceso de flujo vaginal.

Para controlar los niveles de histamina y también de estrógenos es esencial apoyar al hígado, que favorece la eliminación de ambas sustancias.

Los alimentos y las plantas de propiedades depurativas serán de gran ayuda:

Llevar a cabo la dieta baja en histamina también favorecerá la disminución de los estrógenos. En este vídeo te contamos cómo se favorece la función del hígado en una dieta antiestrogénica, que también te servirá en el caso de una dieta baja en histamina:

Además es preciso eliminar edulcorantes, alcohol y harinas refinadas, y evitar la exposición a contaminantes estrogénicos como los pesticidas en alimentos y sustancias que se hallan en plásticos y cosméticos.

Menú semanal bajo en histamina

Este menú semanal descargable no solo es un menú bajo en histamina, sino que además ayuda al hígado y está pensado para ayudar a desinflamar y regenerar el intestino.

Incluye  recetas con alimentos sin histamina que aportan todos los nutrientes y favorecen que el intestino vuelva a producir la enzima DAO.

Como verás, este menú semanal te permite seguir una dieta baja en histamina variada y equilibrada. En él encontrarás propuestas de desayunos bajos en histamina muy nutritivos y propuestas de comidas y cenas bajas en histamina depurativas que apoyan la fundamental labor del hígado en este proceso.