Las manchas rojas en la piel pueden aparecer por diferentes causas en distintas áreas del cuerpo y presentar varias formas. Generalmente, son benignas y no entrañan ningún peligro. Uno de los tipos de manchas rojas son las petequias (también llamados puntos rojos), de las que tratamos en este artículo.

En algunas ocasiones aparecen sin más y no producen otras manifestaciones más allá de su presencia. En otros casos, pueden causar picor y resultar algo molestas, sobre todo, si su aparición está relacionada con procesos febriles, golpes, esfuerzo físico o minúsculos traumatismos, envejecimiento e incluso por la acción de algunos medicamentos

¿Qué son las petequias?

Las petequias son manchas pequeñas, puntiformes, de color rojo, amarronado o morado que aparecen en la piel. El tono puede variar dependiendo de la zona en la que aparecen y del tono y subtono de tu piel.  Se forman a causa de la rotura de pequeños capilares sanguíneos, lo que provoca que una pequeña cantidad de sangre salga y se quede bajo la piel, de forma parecida a cuando tenemos un hematoma, pero de tamaño mucho menor.  

  • Si se miran de cerca, se puede ver que las petequias son como minúsculas gotas de sangre o un capilar dilatado.

Las petequias son, pues, un tipo de manchas rojas que pueden ser puntiformes,  con un diámetro generalmente inferior a 1 milímetro (raramente miden más de 2 milímetros). Ahora bien, según la causa, varias petequias pueden formarse en la misma zona muy cerca unas de otras, y su aspecto puede simular una mancha roja de unos 4 milímetros, como una peca.

Aunque algunas personas llaman lunares rojos o puntos rubí a las petequias, no lo son. Es cierto que suelen aparecer a partir de los 40 años, coincidiendo con la aparición de otros signos de envejecimiento cutáneo, y eso puede hacer que se confundan. Pero las petequias surgen porque, a medida que envejecemos, los vasos sanguíneos se vuelven más frágiles y la piel pierde elasticidad, por lo que cualquier golpe, presión, proceso febril debido a infecciones… puede producir ese leve sangrado bajo la piel. 

En personas más jóvenes pueden empezar a aparecer algunos puntos rojos muy diseminados. Es un signo sin riesgo pero que invita a cuidarse.

Las petequias no son lunares

Si tienes lunares y pecas es posible que creas que las petequias son lunares incipientes y que luego se volverán marrones y se convertirán en lunares como otros que tienes. Pero no… Las petequias no son lunares

  • Los lunares son una zona de mayor pigmentación por acúmulo de melanina.

Recuerda que cualquier mancha, lunar o angioma que aparezca en la piel requiere observación para valorar si crece y cuál es su evolución.

¿Por qué salen las petequias o puntos rojos en la piel?

Las causas más comunes para la aparición de petequias son:

  • Afecciones, infecciones y procesos febriles.
  • Traumatismos o presión en una zona por esfuerzo.
  • Fármacos que afectan a los capilares o a la circulación sanguínea.
  • Envejecimiento.
  • Deficiencias nutricionales

Petequias por afecciones como infecciones o fiebre

Algunas afecciones infecciosas que cursan con fiebre o con irritación, como por ejemplo en ciertas dermatitispueden llegar a afectar a los capilares subcutáneos y provocar su rotura creando las petequias: en este caso, suelen desaparecer una vez el proceso se resuelve.

Ejemplos de infecciones que pueden provocar petequias son la mononucleosis por virus de Epstein Barr, infección por citomegalovirus, meningococos, rubeola, estreptococos que provocan amigdalitis, infección por coronavirus SARS-CoV-2.

Las vasculitis o inflamación de los vasos también pueden manifestarse también con petequias, pues puede implicar una mayor facilidad para rotura de los capilares sanguíneos.

Ciertas afecciones que cursan por alteraciones del número de células sanguíneas, como por ejemplo en el número de plaquetas, pueden cursar con petequias.

Petequias por traumatismos o presión excesiva

Realizar esfuerzos físicos intensos puede provocar petequias. Esto se ve facilitado cuando el esfuerzo se realiza en lugares con altas temperaturas. Al realizar un esfuerzo intenso, los capilares pueden romperse bajo la piel debido a la presión que soportan y estimulados por el calor excesivo que provoca vasodilatación.

Un caso muy concreto son las petequias que aparecen cuando una persona adulta o un niño vomitaEn los niños con piel clara se observa que, cuando lloran mucho, tienen accesos de tos que les supone mucho esfuerzo y/o vomitan, les aparecen petequias en la cara. Al poco tiempo, desaparecerán.

En el caso de vómitos, llanto o tos puede o no estar relacionado con un proceso infeccioso. En adultos, las petequias que aparecen al vomitar se deben al esfuerzo y suelen aparecer en la cara. En niños puede ocurrir incluso con una rabieta. Los niños se enrojecen y, tras el llanto y vómito, vemos que tienen pequeñas petequias en la cara.

Ciertos trabajos o actividades que requieren hacer presión o una posición en la que recibes una presión o golpeteo, también pueden promover la aparición de petequias. 

Petequias como efecto secundario del uso de fármacos

Algunos fármacos, como fenitoína, anticoagulantes, quimioterapia o quinina, entre otros, pueden promover la aparición de petequias. Lee siempre atentamente los prospectos y consulta con tu profesional de la salud ante la aparición de petequias o de hematomas siempre que tomes algún fármaco o tratamiento médico.

Petequias por envejecimiento

Cuando yo era pequeña mi bisabuela, que tenía muchas varices, tenía además algunas manchas rojas en las piernas y en los brazos, y a mí me llamaban la atención porque, al presionar un poco con el dedo, desaparecían pero al retirar el dedo volvían a aparecer. "No se quitan del todo, saldrán por otro lado, tengo muy mala circulación",  me explicaba. Mi bisabuela sabía que no debía ponerse cerca de una fuente de calor (como los braseros o al lado del radiador) ni al sol, y que debía evitar darse golpes.

Las petequias como manifestación de rotura de capilares pueden manifestarse en la edad avanzada con la aparición de púrpura senil, una afección con manchas rojas en la que se producen tanto petequias como equimosis (la diferencia estriba en el tamaño, las equimosis son mayores).

Con los años, a mi abuelo también le aparecieron, pero yo ya era más mayor y le explicaba que tenía que evitar exponerse al sol y al calor excesivo o llevar cosas apretadas como cuando te cuelgas la bolsa de la compra de un brazo. Mi abuelo se las tomaba como algo normal: "Serán de la diabetes… o del trabajo de tantos años como mecánico". Lo cierto es que razón no le faltaba. . 

¿Por qué te cuento esto de mi familia? Porque entre los factores que facilitan que salgan petequias está la predisposición genética. Pero no es determinante al 100%.

Como hemos visto, los vasos sanguíneos y capilares se vuelven más frágiles con ciertas afecciones, con la edad, con las posibles deficiencias nutricionales, y esa fragilidad capilar es la que puede formar las petequias. 

Ciertos trabajos o actividades que requieren hacer presión o una posición en la que recibes una presión o golpeteo, pueden promover la aparición de petequias. 

Petequias por deficiencias nutricionales

La nutrición es muy importante y podemos minimizar la aparición de las petequias, aunque no sean perjudiciales. Al fin y al cabo: si salen petequias, nos indican cómo están nuestros capilares

La insuficiencia de vitamina C y vitamina K pueden promover la fragilidad capilar. Sin embargo, en dietas con suficientes vegetales y frutas es difícil que dicha deficiencia exista.

¿Cómo minimizar la aparición de las petequias?

En base a los factores que provocan la aparición de puntos rojos o manchas de tipo petequias, los cuidados de la piel están encaminados a:

  • Cuida los vasos sanguíneos mediante la alimentación para evitar la fragilidad capilar. Las frutas que contienen vitamina C y pigmentos de tipo flavonoide favorecen la protección de los capilares sanguíneos, por se dice que tienen acción vitamínica P (vasoprotectora y capilarotropa), como los frutos rojos y azules. Los vegetales que nos aportan vitamina K, ayudan también a los capilares y circulación sanguínea. Podrías necesitar una suplementación específica en este caso consulta con un profesional de la salud.
  • Evita las fuentes de calor directas, principalmente, pero no solo, en las zonas más finas de la piel: cara, cuello, escote, pies, pantorrillas, manos, brazos. Evita también las horas de mayor intensidad solar.
  • Mantén la piel hidratada y protegida mediante cremas o lociones adecuadas a tu tipo de piel. Esto minimiza el envejecimiento y atrofia de la piel.
  • Si padeces alguna alergia que se manifieste en la piel, sea por contacto o por alimentos o fármacos, cuida la exposición a los alergenos. Esto minimiza la implicación de los vasos sanguíneos. Consulta con tu profesional de la salud.
  • Protege los pies y las piernas, así como las manos y antebrazos de picaduras de insectos, pinchazos o golpes, por ejemplo al arreglar plantas, pasear por el campo o realizar trabajos manuales. 
  • Si tienes hipertensión y/o tienes varices, vigila tu alimentación, evita el sobrepeso y lleva una vida saludable. 
  • Si tomas alguna medicación, en el caso de que aparecieran petequias en varias partes simultáneamente consulta con tu profesional de la salud, por si pudiera ser la manifestación de un efecto secundario de la medicación.

Por último, recuerda que las petequias no son graves en sí mismas. Si aparecen petequias de modo simultáneo en varias zonas o acompañadas de intenso picor o fiebre, o si manchas rojas mayores aumentan en número y tamaño o se dispersan por el cuerpo (con o sin picor) acude a tu profesional de la salud para valorar la causa y proponer los cuidados adecuados.