Mar Sueiro conoció el ayurveda a través de un artículo en CuerpoMente hace algunos años. Se interesó en profundizar en esta medicina tradicional que ha cambiado su manera de vivir, hasta el punto de que dejó su empleo en una caja de ahorros y fundó Ediciones Ayurveda, junto con Carmen Soler, para acercarla a los lectores en español.
–¿Qué características del ayurveda son más peculiares o pueden resultar más atractivas?
–El ayurveda es una medicina holística que contempla a cada ser humano como un ser único e irrepetible. Es una medicina tan lógica y cercana que todos pueden entenderla. La parte que habla de la nutrición –aahar o dieta– es, quizás, la más fácil de entender y seguir, aunque es la que más puede beneficiar.
Reeducar nuestro paladar y el de nuestros hijos es fundamental para vivir más y mejor y mantener alejadas las enfermedades físicas y ¡mentales! Otro atractivo es que el ayurveda te hace responsable de tu curación y te hace crecer como persona.
–¿Ha influido el ayurveda en tu estilo de vida?
–Lo ha cambiado totalmente: mi cuerpo, mi mente y mi espíritu están unidos, ya no están disociados. Dejé voluntariamente la Caja de Ahorros en la que trabajaba. Imposible llevar una vida sana trabajando con esos horarios y ese estrés. Además, ese tipo de negocio no iba con mis principios. También creé una editorial con una amiga, basada en esta medicina ancestral que puede ayudar a los demás, me gano la vida honradamente y ¡rodeada de libros! que son mi pasión.
–¿Qué prácticas aconsejarías a los lectores?
–Sin duda, el panchakarma. Pancha es cinco y karma acción. Es una combinación de cinco terapias que purifican el organismo, eliminando todas las toxinas depositadas en el cuerpo.
En India se suele hacer dos veces al año, en primavera y otoño. Es la base para evitar que las enfermedades arraiguen en nuestro cuerpo y para mantenerse joven. Los masajes también los recomiendo, son maravillosos. Y recomendaría cocinar siguiendo las pautas ayurvédicas, que no son muchas, pero que mejoran la digestión y hacen la asimilación de los nutrientes mucho más efectiva para no crear toxinas.
–¿Dónde se puede encontrar un buen terapeuta?
–Lo más conocido del ayurveda son sus masajes y es fácil encontrar a alguien que dé un buen masaje, pero no hay que olvidar que son terapéuticos, no de placer. Y terapeutas en España hay muy pocos. Creo que el ayurveda debería ser una disciplina universitaria, como en Italia o Argentina, por ejemplo.
No en vano el padre de la cirugía fue Susruta, un sabio indio cuyo tratado, el Susruta Samhita, es una de las bases del ayurveda, y cuyas técnicas aún se emplean actualmente en los quirófanos. Una gran noticia fue que hace algunos años se creara un Máster en Terapia Ayurvédica en el Hospital Sant Joan de Déu en Barcelona. Es un gran paso para la obtención de titulación válida y reconocida. Confío en que esta iniciativa sirva de ejemplo y se extienda por España.