Un árbol caducifolio completamente desarrollado evapora hasta 400 litros de agua en un caluroso día de verano, enfriando así el aire a su alrededor.
Además, los árboles con sus copas expansivas son proveedores de sombra. Un solo árbol de hoja caduca con un diámetro de copa de 15 metros logra enfriar un área de 160 metros cuadrados. Eso es aproximadamente del tamaño de un apartamento de cinco habitaciones.
El calor amenaza a los árboles de las ciudades
Es dramático que los árboles de la ciudad se vean amenazados por el calor debido a las altas temperaturas. Pierden agua que se evapora a través de las hojas y debido a que no llueve lo suficiente, no pueden reponer sus reservas y corren peligro de morir de sed.
Para protegerse de esto, los árboles cierran las aberturas de la hoja. Las hojas mueren después de un tiempo, y algunos incluso se deshacen de ramas enteras para ahorrar nutrientes.
Sin agua, los árboles también producen menos nutrientes. Como en invierno, viven de sus reservas y están en riesgo de morir de hambre.
Los árboles sufren y dejan caer sus hojas en el calor abrasador del mediodía. Algunos probablemente no sobrevivirán. No verás las consecuencias hasta el próximo año.
Los árboles jóvenes sufren aún más por el calor. En las ciudades, tienden a estar en áreas densamente construidas donde hay poco espacio para raíces grandes y les resulta difícil crecer de manera estable. Para evitar que mueran, necesitan mucha agua, especialmente durante la fase de crecimiento.
Cómo regar los árboles de manera que conserven el agua
Muchas ciudades y comunidades piden la conservación del agua. Entonces, ¿tiene sentido regar los árboles?
Para algunos de ellos es al menos una cuestión de supervivencia. Debido a que el calor amenaza sobre todo a los árboles recién plantados, sin riego no tienen posibilidad de supervivencia.
Un árbol de calle es una inversión en el futuro. Asegura que la calle esté sombreada y un clima más fresco. Esta es también una contribución importante a la protección del clima.
Por supuesto, hay que ahorrar agua. Independientemente de si en la actualidad hay escasez de agua en una región o no, para regar árboles se pueden utilizar varios recursos:
- Agua procedente de procesos industriales con calidad suficiente.
- El agua estancada.
- El agua de los bebederos de los animales.
- El agua de cocción sin condimentar.
- El agua recogida del lavado de frutas y verduras.
- El agua vieja de los floreros.
- El agua que de otro modo terminaría en el desagüe cuando se establece la temperatura en la ducha.
A la larga, esto dará como resultado una gran cantidad de agua que puedes poner a disposición de los árboles de la ciudad. Si tienes un jardín, puedes recolectar agua de lluvia en un barril de lluvia para regar.
Actualmente no podemos recomendar ni desaconsejar regar los árboles con agua corriente fresca. Lo mejor es averiguar cuál es el estado actual del agua potable en tu región.
Así se salvan los árboles del calor
Toma una regadera o un balde y ayuda a los árboles a sobrevivir el caluroso verano. Hay algunas cosas que debes tener en cuenta:
- El mejor momento para regar es temprano por la mañana o después del atardecer. Se evapora demasiada agua durante el día, por lo que los árboles no se beneficiarían tanto.
- La tierra seca se vuelve casi impermeable después de un tiempo. Por lo tanto, debes asegurarte de que el agua realmente se filtre y no se escurra. El agua debe penetrar hasta la raíz y el cepellón. Así que riega el árbol primero y espera a ver si el agua llega a la tierra
- El riego regular también ayuda a evitar que la tierra alrededor del árbol se seque en primer lugar. Para que pueda absorber más agua la próxima vez que llueva
- Debes regar cada árbol con unos diez cubos de agua, preferiblemente una vez a la semana
Si quieres proteger los árboles regándolos con agua corriente debes asegurarte que esa acción no represente actualmente una amenaza para el suministro de agua potable de tu pueblo o ciudad.
¿El agua del grifo no es cara?
Un litro de agua del grifo cuesta una media de 0,00189 euros en España. Diez litros de agua caben en un cubo o en una regadera grande y te costarán poco. Recuerda que el agua para regar un árbol no es un lujo o un derroche, sino una inversión.
Con la sequía vienen otros peligros
Además de regar los árboles, hay algunas otras cosas a tener en cuenta para proteger los árboles. En muchas regiones hay riesgo de incendios forestales debido a la sequía.
- Está prohibido fumar o hacer barbacoas en el bosque y sus inmediaciones
- Los automóviles no deben estacionarse sobre pasto alto, ya que el calor residual del motor puede encender el pasto seco.
- Los cigarrillos encendidos no deben tirarse a la naturaleza (lo cual es evidente) y hay que tener cuidado incluso en los cementerios: encender velas no está libre de riesgo.