Como resultado del cambio climático, las fuertes lluvias son cada vez más frecuentes. Hablamos de "lluvia intensa" cuando cae una cantidad inusualmente grande de precipitación en un período de tiempo muy corto. Esto es, de 15 a 30 mm/hora. La intensidad es “muy fuerte” cuando cae entre 30 y 60 mm/hora y es torrencial cuando cae por encima de 60 mm/hora.

Protege las plantas del encharcamiento durante las lluvias fuertes

Hay una serie de cosas que puedes hacer para proteger tu jardín de las lluvias fuertes. Es particularmente importante que protejas las plantas del encharcamiento.

Puedes lograr esto cavando trincheras y plantando camas con cierta pendiente. De esta manera, el exceso de agua se aleja de las plantas. También puedes usar grava o arena para crear drenaje en el suelo debajo de las plantas, de forma que las raíces no queden sumergidas.

Alternativamente, puedes montar un tejado o túnel protector de plantas. Puedes comprarlo directamente en un centro de jardinería o construirlo tu misma.

Si deseas hacer un túnel de este tipo tu misma, necesitarás una bolsa de basura grande y algo de alambre. Corta la bolsa de basura grande y pégala al alambre para formar una especie de carpa o túnel. Luego ponlo sobre tus plantas y fíjalo al suelo. Tan pronto como la tormenta amaine, puedes quitar el túnel.

Protege tu césped con una rejilla

También puedes proteger el césped de las fuertes lluvias para que no se convierta en un charco de barro. Para asegurarte de que el césped siga recibiendo suficiente oxígeno y pueda "respirar", puedes colocar una rejilla que refuerza el suelo.

También puedes ayudar a tu césped después de la lluvia aflojando la tierra. Con la ayuda de horquillas de ventilación, zapatos con púas o ventiladores motorizados, puedes hacer pequeños agujeros en el césped para que drene el agua.

También puedes ayudar a tu césped a largo plazo escarificándolo regularmente.

Escarificar el césped

El escarificado es un proceso que consiste en arañar superficialmente la tierra, eliminando restos de raíces, tierra y hojas que se han ido acumulando. Es como una manera de abrir un poco el suelo para poder airearlo.

Puedes escarificar el césped desde la primavera hasta el otoño. Sin embargo, el mejor momento es en abril y mayo.

En la primavera, debes rociar el césped con compost y luego cortarlo dos veces. Una vez que el césped haya sido cortado al menos dos veces, puedes escarificarlo. Puedes escarificar el césped hasta dos veces al año, por ejemplo en primavera y otoño. En cualquier caso, siempre debe estar recién cortado y seco.Entonces se puede empezar a escarificar:

  • Ajusta la altura del escarificador: según el grosor de los recortes viejos en el césped y el grosor del musgo, las cuchillas deben marcar el suelo una o dos pulgadas de profundidad.
  • Luego conduce el escarificador en carriles largos a través del césped sin pararse mucho. De lo contrario, parte del césped se dañará demasiado.
  • Después repite la operación en perpendicular para crear un patrón de tablero de ajedrez.
  • Rastrilla el musgo y los recortes viejos del césped. De lo contrario, se atascarán de nuevo.
  • Si hay un parche de césped desnudo, vuelve a sembrar el césped inmediatamente.
  • Después de escarificar, puedes extender una fina capa de arena de uno a dos centímetros sobre el césped. La arena afloja la tierra y permite que llegue más oxígeno a la hierba.

Si escarificas tu césped en mayo o junio, debes regarlo al final del proceso para que vuelva a crecer más rápido.

Revisa los árboles después de lluvias FUERTES

Los árboles también pueden verse afectados por las fuertes lluvias, sobre todo si son prolongadas.

Si el árbol tiene una copa grande, las fuertes lluvias pueden actuar como una palanca. Si además hay ráfagas de viento, un árbol grande puede incluso volcarse.

Por lo tanto, debes inspeccionar cuidadosamente la madera en busca de daños después de fuertes lluvias.

Si el suelo es demasiado blando, el árbol puede caerse. Para evitarlo es necesario asegurarlo con un poste de madera estable.

Para hacerlo, clava la madera verticalmente en el suelo y ata una cuerda gruesa al árbol. Esto estabiliza el árbol y evitará que se vuelque.

Más consejos de jardinería para después de una fuerte lluvia

Si tu jardín ha sobrevivido a un episodio de fuertes lluvias, hay mucho que hacer:

  • Saca el agua estancada o vacíala de las macetas, así ningún mosquito puede propagarse.
  • Espera unos días para fertilizar con compost,  ya que el exceso de agua lo diluirá demasiado.
  • Recoge caracoles, a los que les gusta un ambiente húmedo.
  • No podes tus árboles, ya que son más susceptibles a las enfermedades después de una lluvia intensa.