Metas, objetivos y retos. A menudo no los conseguimos alcanzar simplemente porque no nos vemos capaces de lograrlo. Sin embargo, si nos fijamos en personas que lograron conseguir esos propósitos antes que nosotros, podemos convencernos de que, en realidad, sí tenemos capacidad para alcanzar los nuestros.
Nuestro pensamiento condiciona nuestra realidad. El especialista en liderazgo Robin S. Sharma, autor de El monje que vendió su Ferrari (Grijalbo), afirma que lo que creemos sobre nosotros se convierte en una profecía que se cumple “por que aquello en lo que crees es lo que determina tus acciones, y uno nunca obra contrariamente a como piensa”. El protagonista de su libro lo expresa de la siguiente manera: “Si cuidas de tu mente, si la nutres y la cultivas como si fuera un fértil jardín, florecerá más allá de tus expectativas. Pero si dejas que la maleza arraigue, nunca podrás alcanzar la paz de espíritu y armonía interna”.
Referentes que nos ayudan a conseguir lo "inalcanzable"
Un ejemplo que ha sido y todavía hoy es una referencia para la mayoría de los entrenadores personales de todo el mundo es el de Roger Bannister; en su día, un esmirriado estudiante de medicina de Oxford que, en 1952, hizo el papel de la triste figura en los juegos olímpicos, pues solo pudo conseguir un cuarto puesto en la final olímpica de atletismo.
Todo cambió en mayo de 1954; Bannister se convirtió en la primera persona que rompió la barrera de los cuatro minutos en los 1.500 metros lisos. Hubo quien calificó la hazaña de milagro porque, hasta ese momento, el límite de los cuatro minutos se consideraba infranqueable, y no solo por los propios atletas, también por entrenadores y fisiólogos. La revista especializada Sports Illustratedlo calificó como el logro atlético individual más importante del siglo XX y eligió a Bannister como “el deportista del año”.
Menos conocido es lo que ocurrió tras el éxito de Bannister. Solo 46 días después, otro corredor, el australiano John Landy, batió el récord de Bannister. Y a partir de ahí, en siguientes temporadas, más corredores lograron batir una marca que, hasta que Bannister lo consiguió, se consideraba totalmente inalcanzable. Imposible.
En cuestión de tres años, diecisiete corredores habían igualado el mayor logro atlético del siglo XX.
Lo curioso, según cuenta el periodista Dan Coyle en su libro Las claves del talento (Zenith), es que nada había cambiado. La superficie de las pistas era exactamente la misma; el modo de entrenamiento era igual que antes; y, por decirlo de algún modo, los genes también eran iguales.
“Atribuir este hecho a la autoconfianza o al pensamiento positivo es no entender la cuestión”, afirma, contundente, Coyle. El cambio, en consecuencia, no procedía del interior de los atletas sino que todos ellos respondían a un factor externo. “los diecisiete corredores recibieron una señal muy clara: puedes hacerlo.”
Lo que otros han logrado se convierte en un pilar en el que sustentarnos mentalmente. Y eso genera autoconfianza, por mucho que diga Coyle. El especialista en liderazgo Robin S. Sharma, afirma que Bannister demostró al mundo que lo imposible era posible. “la gente”, afirma Sharma, “tuvo un nuevo punto de referencia y, armada con ese conocimiento, hizo lo imposible”. Sharma nos da su receta para que cumplamos nuestras metas y nos recomienda preguntarnos: “¿cuál es tu milla de los cuatro minutos? ¿Qué nociones has dado por imposibles? ¿Qué falsas suposiciones has adoptado respecto a lo que no puedes tener, no puedes ser o no puedes hacer?”.
Frases para lograr inpiración y alcanzar tus metas
El poeta griego Hesíodo lo enunció de la siguiente manera: “Si añades un poco a lo poco, y lo haces así con frecuencia, pronto llegará a ser mucho”. Otros autores han escrito posteriormente sobre el poder de la voluntad:
- “La mayoría de la gente confunde los límites de su vida con los límites del mundo. Unos pocos no. Únete a ellos”. Arthur Schopenhauer
- “Las limitaciones que percibimos en nosotros se convierten en las cadenas que nos atan e impiden que alcancemos la plenitud a la que estamos destinados”. Robin Sharma
- “No existe lo que se llama un ser humano normal. Si tienes un cerebro normal, eres superior”. Ben Carson
- “Muchas personas vIven en un círculo muy restrIngIdo de sus posibilidades. Todos tenemos reservas de vIda en las que nI siquIera soñamos”. William James