En 2020 la organización World Wild Fun/Adena (WWF) lanzó la idea de las dietas basadas en el planeta. Decía esta organización que las dietas basadas en el planeta son patrones de alimentación beneficiosos para todos, que pueden reducir globalmente las emisiones de gases de efecto invernadero de origen alimentario en al menos un 30%, la pérdida de vida silvestre en hasta un 46%, el uso de la tierra para agricultura en al menos un 40% y las muertes.

Ahora, tras dos años de trabajo de la Comisión Internacional EAT Lancet, una asociación de 37 científicos líderes de 16 países, se ha presentado la Planetary Health Diet o Dieta para la Salud Planetaria.

Los miembros de la comisión representan disciplinas como la salud, la sostenibilidad, la economía, la política y la agricultura. Los investigadores respondieron a la pregunta: "¿Podemos alimentar a una población futura de diez mil millones de personas de manera saludable, sin destruir nuestro planeta?".

El resultado es la Planetary Health Diet. Su objetivo principal es allanar el camino para crear un sistema alimentario mundial sostenible, que proporcione alimentos saludables para una población mundial en crecimiento.

Por qué seguir la dieta planetaria

Según el estudio publicado en The Lancet, una de cada cinco personas muere como consecuencia de una dieta poco saludable. La mala alimentación es responsable de más muertes que todas las drogas juntas. Pero lo que comen las personas no solo afecta solo a su salud, también afecta al planeta.

Debido a la forma en que se producen nuestros alimentos, generamos grandes cantidades de gases con efecto invernadero que están causando el cambio climático. Además la producción de alimentos amenaza los ecosistemas, acelera la extinción de especies, agota los recursos naturales y puede favorecer la extensión de las enfermedades infecciosas a grupos de población cada vez más grandes.

Si se implementa con éxito, la dieta planetaria podría evitar aproximadamente 11 millones de muertes prematuras al año y minimizar los efectos nocivos del cambio climático, la pérdida de especies y la deforestación, según la comisión.

¿Cómo se podrá alimentar a 10 mil millones de personas en 2050?

Los expertos de la Comisión EAT Lancet estiman que para alimentar a diez mil millones de personas sin calentar el planeta ni agotar recursos naturales es necesario reducir a la mitad el consumo de carne roja y azúcar.

Por otro lado, la proporción de verduras en nuestra dieta debe aumentar enormemente. Frutas, frutos secos y legumbres también deben consumirse en cantidades muy superiores a las actuales.

El menú desarrollado por los expertos refleja una dieta "flexitariana", que se basa en gran medida en plantas y solo incluye productos animales con moderación.

El modelo puede ser adaptado por cualquier persona, en cualquier parte del mundo, independientemente de su dieta anterior, preferencias individuales y tradiciones culturales. Tanto si eres flexitariano, pescetariano, vegetariano o vegano, puedes seguir las orientaciones de la Planetary Diet Health.

¿Cómo puedo seguir la dieta planetaria?

La Planetary Health Diet brinda recomendaciones y pautas sobre cuánto comer de cada grupo de alimentos, con niveles máximos para las proteínas animales en particular:

  • La mitad del plato debe consistir en frutas y verduras.
  • La otra mitad debe estar ocupado por cereales integrales, legumbres, ácidos grasos insaturados y cantidades moderadas de productos de origen animal.
  • Los granos refinados, los alimentos ultraprocesados ​​y los azúcares añadidos deben evitarse o consumirse en cantidades muy limitadas.

¿Qué lleva un plato de la dieta planetaria?

El plan de nutrición se basa en una ingesta calórica de 2.500 calorías por día, que se puede adaptar a las necesidades personales. La cantidad recomendada por día se expresa gramos (entre paréntesis, los rangos posibles):

1. Hidratos de carbono

  • Cereales integrales: 232 g
  • Verduras con almidón (patatas, boniato, etc.): 50 g (0-100 g)
  • Verduras: 300 g (200-600g)
  • Fruta: 200 g (100-300g)

2. Fuentes de proteínas

  • Carne de ternera, cordero o cerdo: 14 g (0-28 g)
  • Aves: 29 g (0-58g)
  • Huevos: 13 g (0-25g)
  • Pescado: 28 g (0-100g)
  • Legumbres: 75 g (0-100g)
  • Frutos secos: 50 g (0-75g)
  • Productos lácteos (leche entera o productos elaborados): 250 g (0-500g)

3. Grasas

  • Grasas insaturadas (oliva, canola, girasol, soja, maní, semilla de uva): 40 g (20-80 g)
  • Grasas saturadas: 11,8 g (0-11,8 g)

Por supuesto, estos son promedios diarios, 28 g de pescado y 13 g de huevo apenas constituyen una comida decente. Los valores entre paréntesis significan un rango que permite implementar la dieta de manera flexible para todos. Por ejemplo, es posible una interpretación de este modelo en la que no se consuman productos animales en absoluto, y también una para los flexitarianos que coman un bistec pequeño cada dos semanas.

La nueva dieta es una referencia para todos

"Sabemos que en el mundo se come de manera muy diferente", dice Jessica Fanzo, una de las autoras del estudio, en el podcast de The Lancet. No tiene sentido, por ejemplo, idealizar la dieta mediterránea, porque no se puede llevar a cabo en los cinco continente, ni recomendar el consumo de pescado a todo el mundo. Fanzo explica que con la Planetary Health Diet se trata de proporcionar una referencia que puede y debe adaptarse a cualquier dieta en todo el mundo.

Los investigadores no solo han tenido en cuenta los hábitos alimentarios de cada comunidad humana, sino también otros aspectos, como la producción y el desperdicio de alimentos.

Se trata de un nuevo sistema de coordenadas que hace justicia a los desafíos y la complejidad del sistema alimentario mundial. El objetivo es crear una situación beneficiosa para todos: para cada uno de nosotros y para el medio ambiente.

Referencias científicas: