La boca seca o xerostomía aparece como consecuencia de la disminución de la producción de saliva en la boca. La sequedad en la boca puede, a su vez, provocar molestias y diversos problemas de salud bucal y dental. Puede asociarse, por ejemplo, a efectos secundarios de algunos medicamentos, a ciertas afecciones, problemas neurológicos y desde luego, a la deshidratación.

Dificultad para tragar, escozor, dolor, cambios en el sabor, halitosis, dificultad para dormir son algunos de los síntomas que pueden acompañar a la boca seca. Además, los labios pueden dañarse por dentro y tener una mayor propensión a sufrir heridas, aftas y herpes.

A continuación, repasamos las causas, síntomas y ayudas naturales para evitar y disminuir las molestias relacionadas con la boca seca.

¿Boca seca de forma puntual o crónica?

La boca seca puede aparecer de modo puntual o prolongado. De hecho, cualquier persona ha podido sentir la boca seca en algún momento de su vida, por ejemplo, cuando estamos nerviosos o sentimos ansiedad, es común notar la boca seca. Es algo puntual que ocurre porque el sistema nervioso disminuye la secreción de saliva, lo que hace que nos cueste hablar y articular las palabras, y puede incluso provocar tos seca y la necesidad de beber agua para poder seguir hablando.

  • Si vas a afrontar una situación angustiosa, puede ayudarte tener algún caramelo sin azúcar a mano o comer alguna fruta pequeña como cerezas (algunas personas mantienen los huesos en la boca, sin tragarlos). Unas hojas de menta también pueden ser útiles. El contacto de ese pequeño hueso, caramelo u hoja de menta en la boca estimula la secreción de saliva.

También puedes tener la boca seca por hablar mucho o en un día de mucho calor si no bebes adecuadamente. Así que no te olvides de beber.

Por otro lado, algunos alimentos son astringentes y pueden contribuir a secar la boca, como por ejemplo, algún tipo de caqui, el centro de la piña o la papaya, cuando no están maduros. Al poco rato de haberlos comido, la saliva habrá vuelto a nuestra boca y estaremos más cómodos.

Ciertos medicamentos tienen como efecto secundario la sequedad de boca, ya que disminuyen la secreción de saliva. Entre ellos se encuentran ciertos antidepresivos o algunos sedantes y relajantes musculares. Si el fármaco se toma de modo puntual, tan pronto como el medicamento desaparece del cuerpo, la boca vuelve a la normalidad. Los diuréticos también pueden provocar boca seca, precisamente porque producen eliminación de líquidos.

Cuando se usa un fármaco de modo prolongado o continuado, la sequedad de boca se mantiene y ello puede perjudicar el estado de la boca y de los dientes. Esto se debe a que la saliva tiene un papel muy importante en nuestra salud, no sólo participa en el inicio de la digestión. La saliva tiene una función destacada en el mantenimiento de una salud bucodental correcta. La saliva hidrata y lubrica la boca, actúa como antiséptico evitando el crecimiento de bacterias y de hongos en la boca y en la lengua.

boca seca: causas

Como hemos comentado, la boca seca puede ser algo puntual o prolongado debido a varias causas:

  • Fármacos.
  • Daño del tejido nervioso relacionado con la secreción de saliva.
  • Intervenciones quirúrgicas.
  • Ansiedad, nerviosismo o estrés.
  • Cambios hormonales como durante el embarazo, en la premenopausia y menopausia.
  • Afecciones como la diabetes, problemas respiratorios, roncar, reflujo gastroesofágico, infecciones locales, síndrome de Sjögren, anemia o estados preanémicos, gastroenteritis, vómitos, transpiración abundante.
  • Clima caluroso, con sudoración profusa, sequedad ambiental: en este caso es puntual pero es importante beber agua y protegerse.

Boca seca por la noche

Algunas personas notan sequedad de boca por la noche. Esto puede estar relacionado principalmente con:

  • La ingesta escasa de líquidos general.
  • Fármacos que resecan la boca.
  • El estado dental deteriorado.
  • El uso de productos para prótesis dentales.
  • Infección o inflamación local.
  • Reflujo gastroesofágico y acidez gástrica.
  • Sprays o gotas descongestivas nasales.
  • Roncar o respirar por la boca en lugar de por la nariz, apnea de sueño, uso de respiración asistida.

Boca seca por la noche: remedios

Una ayuda para corregir la sequedad es colocar un humidificador en la habitación

También es importante hacer enjuagues para que la boca esté no sólo hidratada, sino protegida. Si te despiertas por la noche para ir al servicio, puedes aprovechar para hacer un enjuague con agua para rehidratar de nuevo la boca.

En caso de problemas digestivos como ardor, gastritis o reflujo, los cuidados propios de estas afecciones ayudarán a que la garganta y la boca no sufran la sequedad ni la irritación. Es recomendable dormir con elevación del tronco, evitar cenar tarde y hacer cenas ligeras.

Algunas personas utilizan aceites para su higiene bucal y dental y ello puede suavizar la mucosa interna promoviendo una mayor comodidad. Se pueden usar perlas de aceite de onagra, borraja o de lino, abrirlas y con una torunda aplicar el aceite en el interior de la boca. Lógicamente, la salud dental ha de ser revisada para descartar cualquier origen local.

Por otro lado, es importante usar bien los descongestivos nasales, no tragarlos y evitar que caigan a la boca.

Boca seca durante el embarazo

La sequedad de boca durante el embarazo puede aparecer debido a los cambios hormonales y a que el cuerpo tiene mayor necesidad de líquidos para el buen desarrollo del embarazo: la sangre para alimentar al feto, el líquido amniótico provienen de los líquidos del cuerpo materno.

A medida que avanza el embarazo, la cantidad de sangre circulante para el feto es mayor y la madre puede notar, entre otros síntomas, sequedad en la boca.

La lactancia es otro momento importante en que beber es esencial, si no se bebe suficiente no sólo se puede notar sequedad de boca, sino también que la cantidad de leche disminuye. Por ello, beber agua, zumos, comer frutas y hortalizas que aportan líquidos es indispensable. Asimismo, es importante llevar un control profesional para evitar la diabetes gestacional.

Síndrome de Sjögren y boca seca

El síndrome de Sjögren o síndrome de boca ardiente es una afección autoinmune en la que el sistema inmunitario ataca por error a las glándulas relacionadas con la hidratación y humedad de las mucosas y otras estructuras del organismo.

Se produce entonces sequedad en varias partes del cuerpo, entre ellas en la boca, también en los ojos. De hecho, algunas personas con este síndrome sufren simultáneamente boca seca y ojos secos.

Si la sequedad es muy intensa y prolongada, la lengua suele aparecer roja brillante, sin capa, incluso con grietas. La boca y la lengua están irritadas, se percibe escozor y la persona puede sentir irritabilidad y agotamiento por la dificultad de descansar bien y de comer normalmente y por la incomodidad continua.

En mi experiencia, el síndrome de Sjögren se relaciona con el tipo de desequilibrio que subyace en el síndrome de fatiga crónica (SFC). El SFC puede manifestarse de diversas formas, la característica común es la fatiga crónica que no se alivia con el reposo. En el SFC confluyen varios factores desencadenantes de inflamación, infecciones víricas o microbianas crónicas, así como desequilibrios hormonales, nerviosos y del sistema inmunológico, tal como se explica en la teoría The Liver Link.

En conjunto, la situación puede promover estados de inflamación crónica, ya sea fibromialgia, afecciones autoinmunes como artritis reumatoide, y la sequedad interna asociada al síndrome de Sjögren.

Por ello, en el caso del síndrome de Sjögren se recomienda un estudio profesional para contemplar las ayudas nutricionales e inmunomoduladoras más adecuadas a cada persona.

Remedios naturales para la boca seca

En general, podemos indicar algunos cambios en el estilo de vida y remedios naturales sea cual sea la causa de la boca seca:

  • Beber agua, zumos sin azúcar.
  • Evitar el café y el té (son diuréticos y si eres muy sensible a la cafeína sentirás más sequedad).
  • Vigilar la medicación: habla con el/la profesional que la recomendó para poder ajustar dosis o momentos del día.
  • Respirar por la nariz
  • Mantener una humedad adecuada en tu casa, lugar de trabajo y habitación donde descansas.
  • Evitar las comidas pesadas, sobre todo las cenas.
  • Evitar los alimentos y aderezos salados y picantes
  • Evitar el alcohol, actúa como diurético.
  • Ten en cuenta que los sabores amargos suelen promover la eliminación de líquidos.
  • Usar enjuague bucal líquido adecuado: evita los que son muy fuertes de sabor.
  • Usar una pasta de dientes y un cepillo suaves.
  • Usar un spray específico que contenga aceite de árbol de té.
  • Si usas aceites recuerda que es necesario diluirlos con una base de aceite de oliva: sigue las instrucciones del envase.
  • Los ácidos grasos omega 6 (borraja, onagra, lino) ayudan a hidratar las mucosas, pueden usarse también como complemento nutricional.

Por otro lado, conviene llevar encima algo que puedas mover en la boca para estimular la salivación y a la par combatir el amargor y posible halitosis, por ejemplo:

  • Pequeños caramelos sin azúcar, de miel, de propóleo, de menta…
  • Un par de bayas de goji y úsalas como caramelos.
  • Pequeños trozos de fruta seca como orejones o trozos de dátiles.
  • Unas hojas de menta o de hierbabuena.

Recuerda buscar ayuda profesional si tu caso se prolonga y mantener una buena higiene oral.