Los masala chais son tés muy condimentados originarios de la India. A nosotros este tipo de té (que es justo lo que significa chai) nos ha llegado en su mayoría a través del Reino Unido. Hay que recordar que este país fue metrópolis de la India, así que no es extraño que el consumo de ciertos alimentos se extendieran desde allí.
Los masala chai son infusiones muy tonificantes, no solamente por contener teína, sino por la cantidad de especias que forman parte de la receta de esta infusión.
Aunque habitualmente lo encontraremos a base de té negro Assam, también podemos usar té negro desteínado, incluso té verde. El efecto vigorizante está en realidad en la mezcla de especias. Son fáciles de preparar en casa y admiten tantas variaciones como tu imaginación permita.
En el chai tradicional, además del té negro, los ingredientes imprescindibles son estas especias:
- Anís estrellado
- Hinojo dulce
- Clavo de olor
- Semillas de cardamomo
- Jengibre
- Pimienta negra
También es habitual encontrarlo con canela, vainilla o cúrcuma. En realidad, la receta del masala chai cambia en cada zona y familia, como nos pasa a nosotros con los ingredientes del gazpacho. Este también es el motivo por el que, cuando compramos chai ya preparado, varía su sabor de un establecimiento a otro, aunque pidamos la versión clásica.
Para la receta clásica, puedes comprar la mezcla ya hecha en tu tienda de tés de confianza. Seguramente también tendrán algunas versiones aromatizadas de otra forma. En un post anterior de este mismo blog sobre sobre lattes vegetales y deliciosos, tienes también una receta básica de chai latte masala.
Es importante recordar que el consumo de té no está aconsejado junto a ciertos alimentos, ya que interfiere en la absorción de nutrientes tan importantes como el hierro o el zinc. Por lo tanto, la recomendación es que alejemos esta bebida de las comidas principales, especialmente si son ricas en hierro no hemo, o hierro vegetal. De esta forma, podemos disfrutarlo sin que sus taninos secuestren estos minerales tan necesarios.
Te propongo tres recetas de chai casero con mezclas que puedes preparar tú fácilmente en casa:
1. Chai masala de canela
Aunque prefiero utilizar especias en polvo, ya que es una forma de no desperdiciar tanto y de almacenarlas mejor y por más tiempo, en este caso voy a dar las medidas de los ingredientes de la forma más tradicional posible.
Ingredientes para 2-3 tazas:
- 8 gramos de té negro Assam
- 10 g de jengibre fresco
- 1 ramita de canela
- 2-3 estrellas de anís, 1 por taza
- 6 bayas de cardamomo
- 8 clavos de olor
- 250 ml de agua
- 250 ml de leche vegetal
- Endulzante al gusto (opcional)
Preparación:
- Rallamos el jengibre con un rallador especial o, simplemente, lo cortamos en pequeños trozos y lo mazamos ligeramente.
- Pasamos por el mortero las bayas de cardamomo y los clavos, abriéndolos para que sean más aromáticos, sin machacarlos.
- En un cacito, colocamos el agua con todas las especias menos el té.
- Llevamos el agua a ebullición y dejamos que infusionen las especias durante al menos 3 minutos. Si queremos un gusto más o menos intenso, lo podremos controlar de esta forma.
- Añadimos el té negro y la leche vegetal, vigilando que no llegue a ebullición. El tiempo en este caso dependerá de las indicaciones del tipo de té.
- Lo colamos y, si queremos, añadimos el endulzante que hayamos elegido.
Es muy habitual rescatar las estrellas de anís y la ramita de canela para decorar estas bebidas. Puedes elegir la leche vegetal que más te guste, aunque te recomiendo evitar la leche de avena, porque en muchas ocasiones se corta. La de arroz es mucho más digestiva.
También puedes hacer la receta solo con agua, o variar las proporciones a tu gusto.
2. Chai masala cítrico
Esta receta es un ejemplo de variación de la receta tradicional, exactamente igual que la anterior, donde lo que hacemos es cambiar uno de los aromatizadores. En este caso, la canela deja paso a los cítricos, como la naranja o el limón.
Podemos utilizar la piel y el zumo de una naranja fresca, pero es más sencillo si tenemos cítrico liofilizados. Como son más difíciles de encontrar, os dejo la receta con el ingrediente más habitual en nuestra cocina.
Ingredientes para 2-3 tazas:
- 8 gramos de té negro Assam
- 10 g de jengibre fresco
- La piel de una naranja
- 2-3 cucharadas de zumo de naranja
- 2-3 estrellas de anís, 1 por taza
- 6 bayas de cardamomo
- 8 clavos de olor
- 500 ml de agua
- Endulzante al gusto (opcional)
Preparación:
- Vamos a hacer exactamente lo mismo, solo que en este caso lo que infusionaremos será la piel de la naranja y no la canela.
- El zumo lo añadimos al agua desde el principio.
Personalmente, prefiero este tipo de bebida sin leche vegetal, pero podéis probarla de las dos formas.
3. Chai Latte de cúrcuma
El chai latte de cúrcuma más simple lo puedes hacer directamente con el té negro de tu elección. Cúrcuma y pimienta son muy potentes juntas y hacen un maravilloso tándem para mitigar procesos inflamatorios.
Ingredientes para 1 taza:
- 250 ml de leche de arroz
- 1 cucharadita de café rasa de cúrcuma en polvo
- 1 cucharadita de café rasa de pimienta negra recién molida
- 1 cucharada de té de masala chai de té negro
- Opcional: si vas a usar té negro convencional, añade un poco de canela molida, 2 bayas de cardamomo y una estrella de anís para una experiencia más aromatizada.
Idealmente, usaremos una cuchara medidora para té, que nos da ideal de la proporción por taza y persona.
Preparación:
- En un cazo, calentamos la leche de arroz con la pimienta y la cúrcuma, llevándola a ebullición. Si hay otras de las especias opcionales, las ponemos desde el principio siguiendo los pasos de la primera receta de este artículo.
- Bajamos el fuego y añadimos el té. Seguiremos las instrucciones de infusión o cocción propias.
En el caso de hacerlo con un té convencional, sin mezcla masala, es aún más fácil. Añades la bebida de cúrcuma caliente en la taza e infusiones tu té negro de forma habitual, como si se tratase de agua. Aunque tendrá muchos menos matices de sabor, es un latte rápido y fácil de hacer.