Huracanes, inundaciones, sequías... el número de tales catástrofes ha aumentado rápidamente desde la década de 1970. La razón es el cambio climático. Cada desatre climático tiene un coste humano y económico. La catástrofe más cara de todos los tiempos fue el huracán Katrina en 2005, seguido por el huracán Ida (2021).

Entre los años 2000 y 2009 hubo cinco veces más desastres naturales que en la década de 1970, como informó la Organización Mundial del Tiempo (OMM) en Ginebra. Las tormentas e inundaciones representan casi el 80 % de estos desastres climáticos.

El huracán Ida

El huracán Ida, que azotó la isla de Cuba y las costas sur y este de los Estados Unidos en agosto de 2021, podría llegar a ser el desastre de este tipo más costoso de todos los tiempos, ha explicado el Secretario General de la OMM, Petteri Taalas.

Pero todavía es demasiado pronto para precisar la magnitud de los daños. Hasta ahora, el más devastador ha sido el huracán Katrina, que devastó Nueva Orleans y sus alrededores en Estados Unidos en 2005 y causó daños por casi 164 mil millones de dólares (alrededor de 139 mil millones de euros).

Más cerca, en Europa, el pasado mes de julio, las inundaciones en Renania del Norte-Westfalia y Renania-Palatinado (Alemania) causaron 180 víctimas humanas y pérdidas de seguros de alrededor de siete mil millones de euros, según estimaciones.

11.000 desastres en 50 años

Entre 1970 y 2019 se reportaron un total de 11.000 desastres en los que murieron más de dos millones de personas. Los daños ascendieron a 3,6 billones de dólares. El número de desastres relacionados con el clima por década aumentó de 711 (de 1970 a 1979) a 3.536 (2000-2009) y 3.165 (de 2010 a 2019).

La OMM ha evaluado datos sobre tormentas, inundaciones, sequías o eventos de calor extremo e incendios forestales. Representan aproximadamente la mitad de todos los desastres naturales y el 45 % de las muertes. Los terremotos y erupciones volcánicas, por ejemplo, no se tuvieron en cuenta.

El cambio climático acelera los desastres

Estos desastres son cada vez más frecuentes e intensos debido al cambio climático. "Eso significa más olas de calor, sequías e incendios forestales como los que vimos recientemente en Europa y América del Norte", dijo el Secretario General de la OMM, Petteri Taalas.

"Tenemos más vapor de agua en la atmósfera, lo que aumenta las precipitaciones extremas y las inundaciones mortales. El calentamiento del océano ha afectado la frecuencia y ubicación geográfica de las tormentas tropicales más poderosas", añadió.

Desastres con miles de víctimas en los países pobres

Si bien los desastres con los mayores daños ocurrieron en los Estados Unidos debido a la densa población y la infraestructura relativamente costosa, los países en desarrollo lamentaron el 91% de las muertes.

En función de las víctimas mortales, los peores desastres de los últimos 50 años fueron la sequía de 1983 en Etiopía y el ciclón Bhola en 1970 en Bangladesh, cada uno con una estimación de unas 300.000 muertes.

Otos desastres que causaron miles de muertes fueron la sequía de Sudán en 1983 (150.000 muertes), el ciclón Gorky en 1991 en Bangladesh (casi 140.000 víctimas) y el ciclón Nargis en Myanmar en 2008 (138.000 víctimas).

El número de fallecidos ha disminuido

Según las estadísticas de la OMM, el número de desastres relacionados con el clima disminuyó teóricamente de 2010 a 2019 en comparación con la década anterior, de 3536 a 3165. Pero esta disminución solo se debe a que la Universidad de Lovaina en Bélgica, que lleva el registro de desastres, aumentó la intensidad requerida para que un desastre fuera clasificdo como tal, según Taalas.

La OMM y la Organización de las Naciones Unidas en su conjunto están ayudando a los países a establecer sistemas de alerta temprana, pero es necesario aumentar la inversión. Los sistmas de alerta ya han conseguido disminuir significativamente el número de víctimas.