Ahora que hace frío pensamos en las legumbres como un recurso calentito para comer de cuchara, sobre todo potajes y estofados. Sin embargo, podemos seguir utilizando legumbres en otras preparaciones sin recurrir a potentes guisos.
Ya comenté, por ejemplo, que en verano podemos hacer un montón de cosas fresquitas con legumbres.
Pues en invierno es algo parecido, pero con platos calientes. Recuerda que las legumbres son una fuente de proteína barata y sana que podemos consumir todo el año.
Las mejores maneras de preparar legumbres
Te contamos cuáles son las mejores formas de preparar las legumbres para que les saques todo el partido.
1. Patés y cremas
El hummus de garbanzos es el más popular, pero podemos hacerlo también con lentejas o con alubias y servirlo templado o caliente como acompañamiento para nuestras comidas.
2. Ensaladas de legumbres
Las legumbres son esenciales en las ensaladas templadas de otoño e invierno. En lugar de recurrir a ingredientes fríos y crudos, podemos utilizar hortalizas y verduras asadas o al vapor y complementarlas con legumbres recién hechas y escurridas, o hechas a la plancha con especias.
Los garbanzos son una de las legumbres que mejor quedan con cualquier tipo de ensalada. Prueba a tostarlos, hacerlos al horno con especias o a la sartén con alguna salsa antes de añadirlos a tu ensalada.
3. Salsas
Lo más fácil es pensar en salsas consistentes y sabrosas. Se pueden hacer muchas salsas con legumbres, como una salsa boloñesa vegana con lentejas en lugar de carne, una crema de queso vegano con alubias blancas batidas o machacadas, etc.
También puedes espesar cualquier salsa con legumbres pasadas por la batidora. Por ejemplo puedes hacer una salsa para una ensalada con aceite, vinagre y un puñado de garbanzos cocidos. O una salsa para gratinar pasta haciendo una bechamel vegetal y añadiendo alubias trituradas.
4. Pasta con legumbres
Con las pastas en general lo tenemos muy fácil porque solo hemos de mezclar la legumbre elegida con la pasta para tener un buen plato. Por ejemplo espirales integrales con judías pintas, macarrones con judiones, etc.
- Para las pastas largas, como los espaguetis, quedan mejor las legumbres de tamaño pequeño (lentejas de cualquier tipo, azukis, etc), que se integrarán mejor con la pasta.
- Para darle un plus de textura y sabor, pasa por la sartén las legumbres, ya cocidas y escurridas, antes de añadirlas a la pasta.
- Las pastas rellenables como las lasañas y los canelones nos dan más juego aún. Podemos rellenarlas con legumbres, verduras, hortalizas y salsas y hacer de ellas platos completísimos. Por ejemplo, una lasaña de garbanzos con verduras, salsa de tomate casera y bechamel con frutos secos.
5. Hamburguesas
Las legumbres suelen ser el principal ingrediente de las hamburguesas veganas, porque nos aportan toda la estructura de la preparación, son fáciles de mezclar, quedan cremosas…
Puedes mezclar distintos tipos de legumbres para hacer hamburguesas, por eso no hay problema. De hecho puedes aprovechar restos para hacerlas. Por ejemplo, de judías negras y tofu (de soja, legumbre), alubias blancas y lentejas, garbanzos y azukis, etc. Añade las verduras que quieras a tu gusto y completa tu hamburguesa.
6. Albóndigas veganas
Las legumbres también son geniales para hacer albóndigas. Para mi gusto, las mejores son los garbanzos y las lentejas, pero puedes hacerlas con las que quieras.
Lo importante es que la legumbre que elijas sea el ingrediente principal, y después puedes añadir verduras, especias, pan rallado y algún aglomerante como la harina integral si es necesario.
7. Tacos, fajitas, burritos…
Cualquiera de estas delicias enrolladas queda estupenda si añadimos un buen puñado de legumbres, en especial frijoles negros, judías rojas o garbanzos.
Puedes hacerlos antes a la sartén con alguna salsa para que queden más cremosos.
8. Pasteles de legumbres
Para hacer un pastel de legumbres solo necesitas un molde rectangular y los ingredientes picados bien finos o batidos. Lo ideal sería combinar 3 tipos distintos de ingredientes: legumbres, verduras y cereales. Por ejemplo garbanzos, lentejas y judías como legumbre; espinacas, zanahoria y calabaza como verduras; quinoa, arroz integral y avena como cereales, y especias y hierbas al gusto.
Compáctalo bien y hazlo al horno hasta que esté doradito. Al sacarlo tendrás un pastel de legumbres, verduras y cereales que puedes cortar en porciones y servir caliente.