Científicos de la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign han hallado que los marcadores sanguíneos de dos ácidos grasos saturados junto con ciertos ácidos grasos omega-6, -7 y -9 se correlacionan con mejores puntuaciones en las pruebas de memoria. Además, se asociaron con estructuras cerebrales más grandes en las cortezas frontal, temporal, parietal e insular.

Los autores del estudio, publicado en The Journal of Nutrition, exploraron los vínculos entre tres variables que predicen de forma independiente el envejecimiento saludable: la ingesta de nutrientes, la estructura cerebral y la función cognitiva. Su análisis se suma a la evidencia de que estos factores contribuyen conjuntamente a la salud del cerebro en los adultos mayores.

La dieta influye sobre el desarrollo y funcionamiento del cerebro

Estudios anteriores han descubierto asociaciones entre nutrientes individuales o clases de nutrientes y regiones o funciones específicas del cerebro, pero se ha realizado muy poca investigación que analice de manera integral la salud del cerebro, la cognición y los patrones dietéticos generales en general, según Aron Barbey, profesor de psicología, bioingeniería y neurociencia en la Universidad de Illinois Urbana-Champaign, quien dirigió el estudio junto con el investigador postdoctoral Tanveer Talukdar y el científico investigador en psicología Chris Zwilling.

"Nuestros hallazgos revelan que podemos usar biomarcadores de nutrientes, pruebas cognitivas y medidas de resonancia magnética de la estructura cerebral para dar cuenta de gran parte de las variaciones relacionadas con el envejecimiento saludable", dijo Barbey. "Esto nos permite comprender mejor cómo la nutrición contribuye a la salud, el envejecimiento y la enfermedad".

Los investigadores recopilaron datos de 111 adultos mayores sanos con resonancias magnéticas estructurales, biomarcadores en sangre de 52 nutrientes dietéticos y pruebas de memoria e inteligencia. Al combinar estas medidas, el equipo encontró asociaciones entre docenas de características que  en conjunto promueven la salud cerebral y cognitiva. 

Los ácidos grasos omega-6, -7 y -9 mejoran la memoria y el razonamiento

Los participantes del estudio que obtuvieron puntuaciones más altas en las pruebas de memoria tendieron a tener mayores volúmenes de materia gris y niveles más altos de marcadores de ácidos grasos omega-6, -7 y -9 en la sangre.

Los que obtuvieron peores resultados en las pruebas cognitivas también tenían volúmenes más pequeños de materia gris en esas regiones del cerebro y niveles más bajos de esos marcadores dietéticos.

El estudio contribuye a la evidencia de que la nutrición es un factor clave en el envejecimiento saludable, dijeron los investigadores. 

Los omega-3 mejoran la estructura cerebral

Otra investigación anterior ha vinculado los ácidos grasos de la familia omega-3 con una mejor estructura cerebral y mejor cognición en la mediana edad. 

El estudio, publicado en la revista Neurology, la revista médica de la Academia Estadounidense de Neurología, determinó que los voluntarios sanos cuyos glóbulos rojos contenían concentraciones más altas de ácidos grasos omega-3 tenían una mejor estructura cerebral y función cognitiva. 

Según los investigadores de la Universidad de Texas en San Antonio, incluso en edades jóvenes, una dieta que incluye algunos ácidos grasos omega-3, ya está protegiendo su cerebro para la mayoría de los indicadores de actividad cerebral.

Un mayor índice de omega-3 se asoció con mayores volúmenes del hipocampo, una estructura en el cerebro que juega un papel importante en el aprendizaje y la memoria. Consumir más omega-3 se asoció con un mejor razonamiento abstracto o la capacidad de comprender conceptos complejos utilizando el pensamiento lógico.

Los investigadores utilizaron una técnica llamada cromatografía de gases para medir las concentraciones de ácidos omega-3 docosahexaenoico (DHA) y eicosapentaenoico (EPA) de los glóbulos rojos. El índice de omega-3 se calculó como DHA más EPA.

"Los ácidos grasos omega-3 como EPA y DHA son micronutrientes clave para el cerebro", afirma la coautora del estudio Debora Melo van Lent. "Vimos los peores resultados en las personas que tenían el menor consumo de omega-3", dijo Satizabal.

Los investigadores aún no saben cómo el DHA y el EPA protegen el cerebro. Una teoría es que, debido a que esos ácidos grasos son necesarios en la membrana de las neuronas, cuando se reemplazan con otros tipos de ácidos grasos se vuelven inestables. Otra explicación puede tener que ver con las propiedades antiinflamatorias de DHA y EPA. 

Además, el estudio mostró que el DHA y el EPA también protegen la salud cerebral en los portadores del gen APOE4, que aumenta el riesgo de desarrollar alzhéimer. 

¿Cuales son los alimentos que aportan grasas saludables para el cerebro?

  • Los omega-6, en concreto, el ácido graso esencial linoleico se encuentra en los frutos secos y semillas. Es conveniente consumir estos alimentos enteros o triturados en el caso de las semillas, preferiblemente sin tostar ni salar. 
  • El acido alfalinolénico, de la familia omega-3, se halla en en las semillas de lino y chía y en las nueces. El organismo transforma una pequeña parte en DHA y EPA. 
  • Los ácidos grasos EPA y DHA se hallan en los pescados grasos. Los vegetarianos y veganos pueden conseguirlos gracias a suplementos a base de algas. 
  • Los omega-7 se encuentran en las nueces de macadamia y en los aguacates. 
  • Los omega-9 se hallan en el aceite de oliva, los pistachos, las almendras y otros frutos secos y semillas.