El consumo de ácidos grasos de la familia omega-3 está vinculado a una edad biológica más joven. Según los estudios científicos, este tipo de grasa ofrece protección a los telómeros, los extremos de los cromosomas, cuyo acortamiento es un indicador de envejecimiento.

El acortamiento de los telómeros es un proceso natural puesto que se produce a medida que las células se multiplican. Pero existen evidencia de que el proceso puede ser más lento o más rápido en función de factores relacionados con el estilo de vida, como la alimentación, el ejercicio físico o la relajación.

Omega-3: beneficios frente al envejecimiento

Los factores que están fuertemente asociados con el acortamiento y la disfunción acelerados de los telómeros son el estrés oxidativo y la inflamación, explican los científicos del Instituto de Genética y Biotecnología Animal de la Academia Polaca de Ciencias en el estudio publicado en Nutrients.​

La capacidad de los ácidos grasos omega-3 para reducir estos efectos negativos está relacionada no solo con su bien documentado efecto beneficioso sobre una serie de enfermedades relacionadas con el estilo de vida, sino también con sus efectos beneficiosos sobre la biología de los telómeros.​

El consumo de ácidos grasos omega-3 para reducir el desgaste acelerado de los telómeros y, en consecuencia, contrarrestar el envejecimiento prematuro y reducir el riesgo de enfermedades relacionadas con la edad genera grandes esperanzas entre los científicos autores del estudio.

Los telómeros y el envejecimiento

Durante la replicación celular, los telómeros evitan que los cromosomas se fusionen entre sí o se reorganicen, lo que podría provocar cáncer. La premio Nobel de medicina Elizabeth Blackburn, una pionera en el estudio de los telómeros en la Universidad de California en San Francisco, comparó los telómeros con los extremos de los cordones de los zapatos, sin los cuales el cordón se desharía.

Con cada replicación los telómeros se acortan, y cuando los telómeros se consumen totalmente, las células se destruyen (apoptosis). El acortamiento o desgaste de los telómeros se mencionó como una de las nueve características del envejecimiento en un artículo fundamental publicado en la revista Cell en 2013 y dirigido por Carlos López-Otín, catedrático de la Universidad de Oviedo.

Un factor que contribuye directamente al acortamiento de los telómeros es el estrés crónico, tanto durante el período prenatal y la niñez, como en la vida adulta, según los autores polacos. La depresión, el tabaquismo, la obesidad y el consumo de alcohol también aceleran el desgaste de los telómeros.​

Omega-3 para proteger los telómeros

En cambio, la restricción calórica y el aumento de los elementos antioxidantes en la dieta protegen contra el acortamiento de los telómeros. En este contexto, los ácidos grasos omega-3 son compuestos dietéticos importantes que, debido a sus propiedades bioquímicas, pueden afectar la biología de los telómeros.

El estudio publicado en Nutrients partió una revisión de la literatura científica que incluyó siete estudios observacionales, los cuales indicaron que, en general, los ácidos grasos omega-3 pueden desempeñar un papel en la biología de los telómeros. Tales resultados, sin embargo, simplemente muestran correlación y no causalidad, lo que ha llevado a los investigadores a realizar estudios dietéticos aleatorios utilizando suplementos de omega-3.

Cuánto omega-3 tomar

Los investigadores informaron sobre cuatro estudios de intervención de este tipo, que se realizaron en una variedad de poblaciones, incluidas madres y sus bebés, personas con insuficiencia renal crónica, personas mayores que sufrían de deterioro cognitivo leve y personas sanas, con sobrepeso, de mediana edad y de edad avanzada. Las dosis de omega-3 utilizadas oscilaron entre un poco más de un gramo por día y cuatro gramos por día. Los datos de los ensayos aleatorios fueron contradictorios: algunos mostraron un beneficio potencial y otros no encontraron efectos.

Los revisores también buscaron en la literatura científica datos de estudios en animales y hallaron tres estudios que probaron un beneficio de la suplementación con omega-3 en la dieta.

"Si bien los resultados de los estudios transversales y aleatorizados en humanos y roedores no son del todo consistentes, la abrumadora cantidad de ellos ha demostrado los efectos beneficiosos de los ácidos grasos omega-3 en la longitud de los telómeros", escribieron los autores.

Referencia científica: