Sudar por la noche no siempre debe causarnos preocupación. Lo más frecuente es que siemplemente nos estamos abrigando demasiado.  Piensa que por la noche desciende naturalmente la temperatura corporal, de manera que es suficiente con mantener la habitación a 18 ºC. Si la calefacción eleva la temperatura a 22-23 y encima nos ponemos encima un edredón cálido en normal que sudemos. 

Los sudores nocturnos que tienen una causa interna puedes estar relacionados con muchos desequilibrios diferentes. Conviene consultarlo con el médico porque algunos se pueden solucionar fácilmente y otros requiere un tratamiento cuidadoso. Pero a veces la causa principal del sudor nocturno se encuentra en nuestra psique.  

Sudoración por estrés, preocupaciones y miedos

Cuando nos sentimos estresados, a menudo dormimos peor. Los pensamientos giran en torno a los problemas. Las preocupaciones y los miedos dificultan que nuestro cuerpo se calme.

En realidad, el miedo modifica nuestra percepción. Si nos sentimos amenazados,  nuestro cuerpo entra en un estado de alarma, libera hormonas del estrés como la adrenalina y el cortisol. Esta reacción física nos permitiría huir de la amenaza o afrontarla, si fuera necesario.

Cuando sentimos miedo, experimentamos síntomas físicos como un latido del corazón acelerado, respiramos más rápido, tensamos los músculos, temblamos y sudamos. Una vez pasado el peligro, nuestro cuerpo vuelve a la normalidad.

Una persona que lucha a menudo con sus preocupaciones, tensiones, estrés y miedos en la vida cotidiana puede encontrarse en un estado de alarma constante y llevarlo consigo a dormir. Los trastornos del sueño, las pesadillas y los sudores nocturnos son posibles consecuencias y se alimentan mutuamente.

¡No más pesadillas!

Tener malos sueños de vez en cuando es normal. Pero, ¿qué hacer cuando los pensamientos que nos atemoriza se acumulan y nos persiguen durante el día y la noche?

Lastécnicas de relajación y los métodos para reducir el estrés pueden resultar útiles. Si estás sufriendo la situación, por ejemplo si te sientes agotada o tienes miedo de agotarte, lo mejor es hablarlo con tu médico de cabecera.

Sudores nocturnos en los trastornos mentales

Los miedos intensos o frecuentes, a menudo sin ninguna razón externa aparente, indican un trastorno de ansiedad. Ejemplos de trastornos de ansiedad son:

  • Crisis de pánico: generalmente no existe una razón objetiva para el miedo, aunque ciertas situaciones pueden convertirse en desencadenantes. Los ataques duran un máximo de 30 minutos. Además de una intensa sensación de ansiedad, a menudo se producen síntomas físicos como palpitaciones, temblores, mareos y sudoración. Es frecuente que la persona piense que está sufriendo un infarto o que va a morir.
  • Trastorno de ansiedad generalizada: los afectados sufren de constantes sentimientos subyacentes de ansiedad. También suelen presentarse síntomas como palpitaciones, temblores, mareos y trastornos del sueño, aunque no son tan agudos como en el pánico.

Debido a que los trastornos de ansiedad pueden estar asociados con un aumento de la sudoración, son una posible causa de sudores nocturnos.

Los miedos también surgen en relación con otras enfermedades mentales, por ejemplo, la depresión o el trastorno de estrés postraumático (TEPT). También en este caso es posible una conexión con los sudores nocturnos.

¿Estoy simplemente ansiosa o es un problema serio?

Cualquiera que sufra problemas psicológicos como ansiedad, ataques de pánico, depresión o pesadillas estresantes debe buscar ayuda profesional.

Una derivación a un consultorio especializado puede tener sentido. Dependiendo de la situación, se puede utilizar psicoterapia o medicación. La terapia adecuada también puede mejorar los sudores nocturnos.

ES Importante saber que los sudores nocturnos pueden ser un efecto secundario de los medicamentos para la depresión. Ante cualquier sospecha, es recomendable hablar con el especialista en lugar de abandonar el tratamiento sin consultarlo.