Las hemorroides son una de las afecciones más frecuentes en la consulta de los médicos de cabecera. Muchos casos, incluso, se descubren en urgencias, cuando la persona acude alarmada porque ha visto sangre en el papel de wáter o las heces. 

Las almorranas o hemorroides son venas inflamadas o hinchadas alrededor del ano o en la parte final del recto. Hay dos tipos: externas, que se forman debajo de la piel alrededor del ano, e internas, que aparecen en el revestimiento del ano y el recto inferior. Los síntomas son dolor y picor intensos.

En la mayoría de los casos el médico prescribe lavados con agua tibia, analgésicos y pomadas. Las compresas con agua de hamamelis son un conocido remedios natural. En unos pocos días la hemorroide desaparecerá, pero no son infrecuentes las repeticiones. Si no desaparece, el médico tiene que valorar otro tratamiento. 

Mano de santo para las hemorroides

Muchos remedios naturales para problemas leves son eficaces pero no tienen frecuentemente el aval de los estudios científicos. Ya se sabe que las soluciones sencillas y baratas no atraen a las empresas farmacéuticas. Sin embargo, el tratamiento de las hemorroides con azúcar -sí, con azúcar- cuenta con un estudio científico publicado en la revista La clínica terapéutica.  

Según el equipo de investigadores dirigido por el doctor Apostolos Stamatiadis, de la Clínica Colorrectal de Atenas (Grecia), "la aplicación de azúcar granulada sobre las hemorroides inflamadas produce una reducción inmediata del edema y un alivio para el paciente".

Después de la aplicación tópica de azúcar, las hemorroides comienzan a reducirse y el edema se reduce drásticamente, mientras que el tejido hemorroidal puede retraerse fácilmente hacia el canal anal, explica en el artículo.

El método es una forma económica, rápida e indolora de controlar el empeoramiento de los síntomas, como la hinchazón, el sangrado y la irritación. Además, este método se puede aplicar fácilmente en la consulta del médico de cabecera sin necesidad de ningún tipo de anestesia.

 

El azúcar hace desaparecer el edema

Es muy importante tratar las hemorroides cuanto antes porque los síntomas pueden llegar a ser muy incapacitantes y durar varias semanas en caso de optar por un manejo conservador, es decir, no quirúrgico o invasivo. 

El tratamiento habitual puede incluir analgésicos, baños de asiento calientes o tibios, reposo en la cama, aplicación tópica de compresas de hielo, ablandadores de heces y aplicaciones tópicas calmantes.

Entre las aplicaciones tópicas se encuentran las sustancias hiperosmóticas con el fin de reducir el edema. Entre estas sustancias se halla el azúcar granulada.

El azúcar granulada, azúcar blanco o azúcar de mesa se utiliza en un intento de crear un efecto desecante al inducir un desplazamiento del líquido a través de las hemorroides que conduce a una reducción del edema.

 

Cómo se aplica el azúcar en la hemorroide

Esta técnica se puede aplicar en la consulta del médico de cabecera sin ningún tipo de anestesia. Para que funcione, la zona estar constantemente cubierta de azúcar. Una suave presión manual sobre las hemorroides hace que el procedimiento sea más eficiente. 

El azúcar irá absorbiendo el agua por ósmosis. Después de 10 minutos de aplicación, la diferencia se nota a simple vista. Las hemorroides que sobresalen gradualmente se vuelven significativamente más pequeñas. Finalmente, la hemorroide prolapsada se vuelve fácilmente al canal anal.

Este tratamiento no se puede aplicar en hemorroides externas trombosadas, debido a que la piel que recubre las hemorroides externas impide la transferencia de líquido al azúcar.

En conclusión, la aplicación de azúcar granulada parece ser una forma eficaz de reducir el edema en muchos pacientes que funciona, incluso, con hemorroides internas prolapsadas. La técnica es barata, rápida e indolora.

Prevenir las hemorroides

Una vez superado el problema, es importante tomar medidas para que no se vuelvan a repetir: 

  • Bebe al menos 1,5 litros de agua diarios. 
  • Aumenta el consumo de fibra a través de frutas, hortalizas y legumbres. Añade por lo menos dos o tres raciones diarias más a tu dieta. 
  • No permanezcas sentado durante demasiadas horas. Levántente cada media hora.
  • No te entretengas en el wáter y no hagas nunca fuerza para defecar. 

En cualquier caso, siempre que descubras sangre en las heces o el papel higiénico acude al médico para que realice un diagnóstico.