La Unión Europea tiene un plan con medidas a corto, medio y largo plazo para eliminar el uso de los microplásticos en los productos de consumo y así paliar su tremendo impacto negativo sobre el medio ambiente.
Virginijus Sinkevičius, comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, ha declarado que "la prohibición de los microplásticos añadidos intencionadamente responde a una grave preocupación por el medio ambiente y la salud de las personas".
Por microplásticos se entienden todos los polímeros sintéticos que se presentan en partículas inferiores a los 5 mm, insolubles y resistentes a la degradación. Estos microplásticos se están utilizando en cosméticos, detergentes o juguetes, entre otros bienes de consumo.
Los primeros en ser eliminados son los microplásticos que se añaden a propósito, que se liberan cuando son utilizados y que son prescindibles.
Se acabaron la purpurina y las microesferas en las cremas exfoliantes
Por ejemplo, dentro de 20 días ya no podrán venderse purpurina ni microesferas de plásticos, ni cosméticos que la contengan, como las cremas exfoliantes.
Para otros microplásticos, cuyo uso actual está, en teoría, justificado, se establecen en cada caso unos plazos de eliminación más o menos prolongados para dar tiempo a los fabricantes para que encuentren alternativas con menor impacto. Algunos usos de los microplásticos a los que les queda poco tiempo son:
- El relleno granular (fabricado con el reciclaje de neumáticos) que se utiliza en las pistas deportivas de césped artificial. Se eliminará dentro de cinco años.
- Los microplásticos en detergentes, suavizantes, fertilizantes y pesticidas agrícolas, y medicamentos.
Los microplásticos que son utilizados en los procesos industriales pero que no llegan a los consumidores podrán seguir utilizándose, pero bajo unas medidas estrictas de control para evitar que lleguen al medioambiente.
Mucho camino por recorrer
La ley europea es un gran avance, pero es dudoso que consiga una disminución significativa en la cantidad de microplásticos que se vierten en el medioambiente. Un dato: cada vez que se lava una prenda sintética desprende hasta 700.000 fibras microscópicas que llegan a los océanos y son asimiladas por los seres vivos, según un estudio del Institution of Mechanical Engineers del Reino Unido. El 35% de los microplásticos liberados en los océanos proceden de los textiles sintéticos y no hay ninguna ley a la vista que vaya a restringir su fabricación y consumo.
A nivel particular, solo podemos dejar de utilizar prendas sintéticas y reducir el uso de todo tipo de plásticos. Si tenemos ropa sintética, hay que lavarla en bolsas de malla e instalar filtros en las tuberías de desagüe.
Los microplásticos son perjudiciales para la salud y el medioambiente
Los estudios científicos que demuestran los daños causados por los microplásticos son numerosos. Se ha probado, por ejemplo, que son capaces de penetrar en el organismo humano e invadir la sangre y órganos vitales.
Las medidas se han aprobado a través de una modificación del Reglamento REACH (registro, evaluación, autorización y restricción de sustancias químicas) se inscriben en las estrategias diseñadas por el Pacto Verde Europeo, el Plan de Acción para la Economía Circular y el Plan de Acción de Contaminación Cero, aprobado en mayo de 2021 y cuyo objetivo es reducir la contaminación por microplásticos en un 30 % para el año 2030.