Los padres están de enhorabuena. Los cólicos en el bebé son desesperantes porque los padres ven cómo su hijo sufre y no pueden hacer prácticamente nada para evitarlo. Ahora, una combinación de bacterias digestivas (probióticos) se ha demostrado capaz de aliviar los cólicos de los lactantes.
Los bebés que reciben una combinación de Bifidobacterium longum subsp. longum KABP-042 junto con Pediococcus pentosaceus KABP-041, comercializado por la empresa Kaneka, experimentaron reducciones significativas en la gravedad de los cólicos sin efectos secundarios significativos.
Los probióticos reducen la frecuencia y la intensidad de los cólicos
El estudio publicado en Frontiers of Microbiology muestra que la ingesta de este combinado probiótico durante 14 días fue bien tolerada por los bebés con un diagnóstico de "cólico infantil"o "estreñimiento funcional”. Según los resultados, los probióticos ayudan a reducir los episodios de llanto y su duración.
A pesar de los buenos resultados del estudios, esta fórmula probiótica continúa considerándose un suplemento nutricional, no un medicamento que pueda tratar o curar ninguna enfermedad.
El nuevo estudio se realizó en varias fases. La primera incluyó un análisis informático sobre las propiedades conocidas de las cepas de bacterias utilizadas, lo que descartó cualquier riesgo. Los estudios de toxicología con ratas de laboratorio confirmaron la seguridad de ambas cepas. A continuación experimentos in vitro demostraron que las cepas podían resistir el paso por el estómago y que tenían una buena adhesión a las células intestinales humanas.
Luego, los investigadores probaron los probióticos en un ensayo piloto con 34 bebés diagnosticados con "estreñimiento funcional" o "cólico infantil". Todos los bebés recibieron los probióticos en una dosis total de dos mil millones de UFC por día durante 14 días. El probiótico se administró en forma de gotas.
Los datos indicaron que la gravedad de los síntomas se redujo significativamente después de dos semanas de suplementación.
¿Qué es el cólico del lactante?
Estos cólicos afectan a los bebés con menos de tres meses de vida. El protocolo médico lo diagnostica cuando el niño llora durante tres horas seguidas al menos tres días a la semana y no existe ningún otro trastorno evidente.
Son más frecuentes por la tarde y por la noche y pueden ir acompañados de enrojecimiento facial, barriga algo hinchada y pataleo.
La causa hay que buscarla seguramente en la alteración o inmadurez de la microbiota intestinal. Pero es necesario descartar la posibilidad que sean debidos a intolerancias y alergias alimentarias, u otras alteraciones.
Es eficaz en bebes nacidos por cesárea y alimentados con leche de fórmula
El ensayo piloto también sugirió que la combinación de probióticos fue efectiva independientemente de si el bebé estaba siendo amamantado o alimentado con leche de fórmula. Tambié actuó positivamente tanto en los bebés que habían nacido por parto vaginal como por cesárea. Los cólicos son más frecuentes en los bebés que no han recibido leche materna y en los que han nacido por cesárea.
El estudio confirma que las cepas cumplen con los requisitos probióticos y muestran su eficacia funcional sobre la integridad de la barrera intestinal y la inhibición de patógenos, según los investigadores españoles.
Además, los resultados justifican la realización en el futuro de ensayos clínicos más grandes, aleatorizados, doble ciego, controlados con placebo en bebés con diversos tipos de cólico.
Otros probióticos y tratamientos naturales útiles en caso de cólico
Otra cepa probiótica, el Lactobacillus reuteri, también se ha demostrado útil en caso de cólico. Además los padres pueden tomar las siguientes medidas:
- Permanecer tranquilos y coger al bebé en brazos para transmitirle tranquilidad. Se le pueden cantar nanas (con mucha tranquilidad) y pasearlo en brazos.
- Se puede tumbar al bebé y flexionarle las rodillas llevándolas hacia su pecho y luego estirándolas, con mucha suavidad y tranquilidad. Este movimiento puede ayudarle a eliminar gases.
- También se le puede hacer un masaje sobre el vientre dibujando con la manos círculos en el sentido de las agujas del reloj.
Referencias científicas: