La ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, y el ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, han arrastrado en su cruzada personal contra la homeopatía al Gobierno español y lo han estrellado contra la Comisión Europea.

El órgano de gobierno europeo les ha cortado las alas al recordarles que no está previsto modificar la normativa europea que establece que los preparados homeopáticos son medicamentos y les recuerda también que ningún otro gobierno de los 27 de la Unión ha pedido una modificación en ese sentido.

El gobierno español ha hecho suya la postura de los dos ministros contra la medicina homeopática. No están de acuerdo con que los preparados homeopáticos sean legalmente medicamentos y que se vendan en las farmacias, algo que es posible gracias a las leyes españolas, inscritas en el marco legal europeo actual.

Por eso, el eurodiputado socialista José Blanco preguntó a la Comisión Europea si cabía la posibilidad de modificar la normativa.

La ley europea que protege la homeopatía "está bien tal como está"

La respuesta de la Comisión ha sido clara y contundente. El comisario europeo de Salud, Vytenis Andriukaitis, ha respondido a Blanco que la ley actual "está bien tal como está" y que “no hay solicitudes de otros Estados para modificar la legislación”. Por lo tanto, no hay ningún movimiento en Europa en el sentido que desea el gobierno español.

Blanco había sugerido en su pregunta que es necesario modificar la consideración que reciben los preparados homeopáticos para "clarificar el escenario tanto a los profesionales sanitarios como a los ciudadanos”.

Sin embargo, la Comisión no ve tal necesidad: "el marco normativo actual de los medicamentos homeopáticos tiene en cuenta su carácter específico y halla un equilibrio entre garantizar su calidad y seguridad e informar a los consumidores, incluyendo a los profesionales sanitarios, al tiempo que ofrece a los ciudadanos acceso a estos productos”, dijo Andriukaitis.

Más de 2.000 medicamentos homeopáticos en las farmacias

La ley española actual, de acuerdo con la europea, establece que los medicamentos homeopáticos pueden comercializarse después de un trámite de registro y con el cumplimiento de los procedimientos de fabricación que aseguran su seguridad farmacológica. A esta ley se acogen los 2.008 medicamentos homeopáticos que se pueden encontrar en las farmacias.

De estos 2.008 productos, 12 aspiran a convertirse en medicamentos "con indicaciones terapéuticas", para lo que tendrán que superar las mismas pruebas de eficacia y seguridad que cualquier otro medicamento.

Los 1.996 productos restantes se venden "sin indicación terapéutica". Para los activistas en contra de la homeopatía, esto significa que esos 1.996 productos son "ineficaces" y que, por tanto, no deberían poder venderse como medicamentos.

Los medicamentos homeopáticos pueden ser eficaces

En realidad, que un medicamento homeopático lleve en la etiqueta la declaración "sin indicación terapéutica" no dice nada sobre su calidad y su eficacia en la práctica. Un medicamento homeopático que no tiene indicación terapéutica puede ser eficaz en el marco del tratamiento homeopático.

Los activistas antihomeopatía desconocen que en el contexto homeopático los medicamentos no tienen necesariamente indicaciones terapéuticas, no se prescriben para curar síntomas o afecciones, como ocurre con los medicamentos alopáticos, sino que se administran en función de las características del paciente y su objetivo es favorecer la autocuración.

Así, un mismo medicamento homeopático puede administrarse a pacientes que sufren trastornos muy diferentes. Y, por ejemplo, cinco personas con gripe pueden recibir un medicamento diferente cada una. Esta especificidad de la medicina homeopática es la que se reconoce y se regulan en la normativa europea y también en la española.

Los homeópatas se sienten apoyados por la Comisión

La Asamblea Nacional de Homeopatía, que representa a médicos y profesionales que practican esta medicina, ha manifestado que la respuesta de la comisión representa "un respaldo claro y rotundo" a la homeopatía.

El presidente de esta organización, el doctor Alberto Sacristán, considera que el varapalo de la Comisión al Gobierno debería servirle para "reconsiderar su postura y desista en su particular cruzada".

En esta misma línea, el Comité Europeo de Homeopatía, que representa a 40 asociaciones médicas de 25 países y a cerca de 40.000 médicos, recuerda al gobierno español que la homeopatía es utilizada por 100 millones de personas y está incluida en los sistemas de salud de Suiza, Francia o Reino Unido.

Varias organizaciones médicas homeopáticas internacionales se han manifestado igualmente en contra de las intenciones del gobierno español.

La OMS apoya la integración de las terapias complementarias

De hecho, la actual postura de España está en contra de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dependiente de la ONU.

Para la OMS, la homeopatía y otras terapias complementarias y tradicionales deben ser reconocidas e integradas en los sistemas de sanidad pública para atender mejor las necesidades de los ciudadanos.

Aunque la ministra de Sanidad y el ministro de Ciencia son enemigos declarados de la homeopatía, a la que definen como pseudoterapia, no es una postura unánime en el partido del gobierno.

En la legislatura pasada, el portavoz del PSOE en la comisión de Sanidad, el doctor Jesús María Fernández, dijo que no debía confundirse las "pseudoterapias" con la medicina natural y las terapias naturales, y que estas no deben ser perseguidas, sino integradas en el sistema, tal como propone la OMS.