¿Qué es un granuloma angular?

Los granulomas cutáneos pueden definirse como una reacción inflamatoria crónica, en la que conviven células defensivas (monocitos, macrófagos, linfocitos…) con células alteradas de la piel y capilares que crecen e irrigan la zona.

Existen granulomas de varios tipos: anular, telangiectásico, etc. El granuloma anular es una enfermedad cutánea que consiste en una erupción con tumoraciones rojizas dispuestas en forma de círculo.

Podríamos hablar de una respuesta inflamatoria mal resuelta que se manifiesta como una lesión en la piel que se puede mantener durante tiempo o desaparecer espontáneamente.

¿Por qué aparecen los granulomas?

Su causa está relacionada con agentes externos infecciosos (bacterias, hongos o virus) o no (cuerpos extraños como talco, plástico, sílice…), que el cuerpo intenta destruir.

Lo que ocurre es que, al tener dificultad para hacerlo, envuelve este agente en un tejido fibroso rico en colágeno, formando el granuloma. Así lo aísla e impide que el agente perjudicial se extienda más allá de esta zona.

Generalmente se da en personas que por lo demás se consideran saludables. Ocasionalmente, puede estar asociado con la diabetes o con una enfermedad de la tiroides.

¿Qué síntomas tiene el granuloma?

Puede provocar picazón leve y conviene siempre descartar que no se trata de una micosis.

¿Cómo tratar el granuloma angular?

Es posible que el granuloma no requiera tratamiento, si no crece, pica en exceso o cambia de forma (en cuyo caso es importante consultar con un médico) salvo que se tengan razones estéticas. La mayor parte de las lesiones de los granulomas anulares desaparecen sin tratamiento en un periodo de dos años.

Algunas veces, sin embargo, los anillos pueden permanecer durante muchos años. Es común que aparezcan anillos nuevos años más tarde.

El tratamiento convencional está orientado a combatir la infección con antibióticos, cuando se identifica un agente microbiano causal, o a disminuir la respuesta inflamatoria del organismo con corticoides en los demás casos.

Para acelerar la desaparición de las lesiones, algunas veces se utilizan cremas esteroides tópicas muy fuertes o ungüentos.

La higiene corporal es importante para evitar posibles infecciones cutáneas. Ello no quiere decir que se abuse de los jabones o geles de baño que pueden destruir parte de la flora microbiana defensiva que coloniza nuestra piel. También es beneficioso tomar el sol.

Dieta y granuloma: cómo evitar la inflamación crónica

La medicina naturista ofrece varias soluciones para disminuir los estados crónicos inflamatorios que se pueden producir.

Además, las medidas dietéticas son eficaces para evitar la inflamación crónica. Si tenemos en cuenta estas medidas, tendremos más posibilidades de prevenir o tratar el granuloma.

1. Debemos evitar el exceso los siguientes alimentos para controlar la inflamación.

  • Ácidos grasos omega-6. Se sabe que un exceso de ácidos grasos omega-6, relacionados con el abundante consumo de productos animales (carne, lácteos…), favorecen la inflamación.
  • Productos refinados. Lo mismo ocurre con los productos refinados (harina, azúcar, bollería industrial…) o acidificantes, como las bebidas edulcoradas y con cola.

2. El gluten de las harinas refinadas actuales, modificadas por el hombre, puede despertar también una reacción inmunológica proinflamatoria. Esto es más difícil que ocurra con las harinas tradicionales como las de espelta o de kamut, que llevan siglos conviviendo con nosotros.

3. Debemos incorporar alimentos ricos en omega-3 para normalizar la respuesta inflamatoria y podremos prevenir o tratar el granuloma.

4. Para los problemas de piel siempre son recomendables los alimentos ricos en betacarotenos como las zanahorias, la calabaza, la remolacha o las espinacas…

5. Existen otros alimentos y plantas con propiedades antiinflamatorias que podemos potenciar en nuestra alimentación como:

  • El jengibre.
  • La cúrcuma.
  • El huang (ruibarbo chino).
  • La boswellia (árbol del incienso) aplicada tópicamente.

Estas plantas, además de poder ser incluidas en la alimentación, pueden aplicarse como crema en la zona afectada. Consulta con un especialista.

Puede resultar útil, sobre todo si los granulomas vuelven a aparecer, realizar curas depurativas con ayuno o dieta vegana. Si durante la depuración aumenta o aparece picor, y no desaparece en tres días, el naturismo aconseja interrumpir la dieta depurativa o el ayuno y seguir con una dieta vegetal estricta.

Al mes se repite el ayuno y el resto del tiempo se toma harpagofito, en periodos de 25 días y descansando tres.

Homeopatía para los granulomas

Aunque es difícil recomendar un medicamento homeopático sin observar la lesión granulomatosa, de modo orientativo, a nivel local se puede utilizar una pomada de homeopatía, que se puede pedir en la farmacia: Pomada de Thuya 4 CH. Se aplica en la lesión dos veces al día. Esta pomada también es útil para pequeñas verrugas y en las verrugas plantares.

Berberis vulgaris 7 CH se recomienda para los eccemas secos y los granulomas con forma anular. Se administran de 3 a 5 gránulos dos veces al día. Como remedio principal para proliferaciones como pólipos, verrugas o eccemas, acnés y forúnculos, puede ser útil tomar un tubo-dosis de glóbulos cada domingo a la 15 CH o la 30 CH hasta que mejoren los síntomas (un periodo adecuado serían unos 3 meses).