Cuidar el estado de los dientes y la boca no solo es importante para evitar las visitas al dentista y ofrecer una bonita sonrisa, también es fundamental para la salud intestinal y general.

Las afecciones de la boca, como las periodontitis (inflamación de las encías) van acompañadas de una microbiota oral alterada que favorece las enfermedades inflamatorias intestinales, como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. También están relacionadas con trastornos crónicos como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.

La inflamación de las encías empeora la inflamación intestinal

Tres millones de adultos en Europa se ven afectados por la enfermedad inflamatoria intestinal, aunque se sospecha que hay un elevado número de casos no notificados y también se supone que estas enfermedades seguirán aumentando en los próximos años. Síntomas como la diarrea y el dolor abdominal reducen enormemente la calidad de vida y todavía no existen terapias realmente eficaces para todos los casos.

La doctora Nobuhiko Kamada, profesora de medicina interna en la Universidad de Michigan (Estados Unidos), ha investigado la microbiota intestinal (la totalidad de todos los microorganismos en el sistema digestivo) durante muchos años y ha descubierto que las cepas de bacterias extrañas, que normalmente viven en la cavidad oral, prevalecen en los intestinos de pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal.

Las bacterias de la flora bucal migran a los intestinos

En su estudio, Kamada ha explicado los mecanismos por los cuales las bacterias de la flora oral pueden agravar la inflamación intestinal. Cuando las encías están inflamadas existe un desequilibrio en la distribución de bacterias en la microbiota de la boca, las especies patógenas toman las rienda y no se quedan en la boca sino que migran hacia el intestino donde contribuyen al desarrollo de inflamación.

En realidad, esta migración de bacterias desde la boca no produciría problemas si microbiota intestinal estuviera sana. Porque una flora intestinal sana no permite que otro tipo de microorganismos se instalen en tu territorio. Pero si la microbiota intestinal ya está alterada, las bacterias de la bocal pueden diseminarse sin muchas dificultades y empeoran la inflamación.

En los ratones de laboratorio, se pudo ver que la enfermedad fue más grave en aquellos animales que tenían tanto enfermedad inflamatoria de las encías como enfermedad inflamatoria del intestino.

Las encías enfermas promueven procesos autoinmunes en el intestino

El segundo mecanismo por el cual una microbiota oral alterada puede agravar la inflamación intestinal es el siguiente: si hay inflamación de las encías, se activan determinadas células inmunes de la mucosa oral, las llamadas células TH17, que pueden desencadenar procesos inflamatorios autoinmunitarios.

Estas células TH17 también pueden migrar al intestino y causar problemas allí. Por supuesto, la flora intestinal sana también podría mantener controladas las células TH17, ya que en un entorno sano siempre hay suficientes células reguladoras que previenen los procesos autoinmunes y las reacciones inflamatorias excesivas.

Sin embargo, con una enfermedad intestinal inflamatoria crónica, ya existe un proceso autoinmune en el intestino. Si también hay muchas células TH17 de la cavidad oral, estas pueden agravar aún más la inflamación existente y empeorar la enfermedad.

Tratar la inflamación de las encías mejora los intestinos

Para las personas con inflamación intestinal, estos hallazgos significan que deben prestar mucha atención a su salud dental y de las encías, especialmente si también padecen una enfermedad de la cavidad bucal, para finalmente mejorar también su salud intestinal, recomienda el doctor William Giannobile, profesor de odontología en la Universidad de Michigan.

El doctor Shrinivas Bishu, profesor de gastroenterología tiene muchas esperanzas en la posibilidad de reducir la enfermedad inflamatoria intestinal de esta manera. Para muchos pacientes, los fármacos habituales contra la inflamación intestinal no funcionan en absoluto, lo que restringe enormemente la calidad de vida de los afectados.

Por supuesto, hay que discutir los procedimientos específicos con el dentista para tratar las inflamaciones de la boca. Hay que eliminar la placa bacteriana. Pero hay muchas otras cosas que se pueden hacer en casa para mantener los dientes y las encías saludables, incluso si ya se tiene periodontitis.

En particular, una dieta rica en fibra en vitamina C, omega-3 y antioxidantes puede tener una gran influencia y aliviar, si no curar, la inflamación de las encías.

Referencias científicas: