Muchas veces preparamos comida de más previendo un festín mayor de lo que podemos comer en una sola comida, y lógicamente nos sobran cosas. ¿Qué hacemos con ellas? ¿Las tiramos? ¿En qué podemos transformarlas?

Lo primero de todo, saca los tuppers y guarda las sobras de tus comidas o cenas festivas por separado en la nevera. Tendrás 2-3 días para decidir qué hacer con ello. Aquí van algunas ideas para no desperdiciarlas.

1. Transforma los vegetales sobrantes en paté

Aquí tienes algunas recetas para preparar patés vegetales. Lo más fácil es guardarlos en la nevera y utilizarlos para sándwiches, bocadillos o para picar en cualquier momento. Solo tienes que volver a servirlos. Sin embargo, los patés te van a venir muy bien también para elaborar otras recetas muy socorridas:

  • Rellenos de pasta: si haces pasta casera, utiliza los patés vegetales que te hayan sobrado como relleno. Quedan estupendos, sean cuales sean.
  • Bases para pizza: sobre la masa extiende una fina capa de paté antes de poner la salsa de tomate y los ingredientes, o en lugar de la salsa de tomate.
  • Empanadillas: en empanadas también vale, pero queda mejor para empanadillas, por el tamaño más pequeño. Puedes añadir más cosas al relleno aparte de patés.
  • Canapés rápidos: sea con hojaldre, tostas o rebanadas de pan, siempre puedes preparar canapés con los patés, complementándolos con hortalizas frescas (por ejemplo tomates cherry), mermeladas de hortalizas, hierbas frescas y otros ingredientes.

2. ¡No tires las salsas sobrantes!

Todas las salsas pueden ir a la nevera en envases cerrados. Si tienen restos de migas de pan, quítalos antes de guardarlas.

  • Utiliza las salsas sobrantes en un máximo de 4-5 días para que no se pongan malas.
  • Utilízalas para acompañar tus comidas, o mézclalas entre sí si hay pocas cantidades. La mayonesa vegetal con salsa de tomate queda estupenda, por ejemplo.
  • Hay salsas que también te valen para aliñar ensaladas, como las que se hacen a base de tahini, leche de coco o mayonesa.
  • Las salsas cremosas te sirven también para hacer otros patés vegetales o cremas de verduras. Prueba a añadir un poco de mayonesa vegetal sobrante a un hummus, o un poco de pesto a una vichyssoise.

3. Guarda las guarniciones: ¡les queda otra vida!

Lo que nos sobre de guarniciones, como patatas, zanahorias... lo podemos aprovechar para montar tuppers y comidas el resto de la semana. Solo tenemos que añadir una parte proteica (unas legumbres por ejemplo).

También se pueden utilizar para hacer cremas y purés de verduras muy sabrosos.

4. No tires el pan que sobre

Si han sobrado panes que se puedan poner duros, congélalos dentro de una bolsa de congelación. Después solo tienes que calentarlos en el horno o en un tostador.

Si ya se han puesto duros, te sirven para hacer pan rallado. Aunque haya diferentes tipos de panes no importa, mejor quedarán tus empanados con ello.

5. Congela o reparte lo que no puedas reutilizar

Si no te decides, congélalo para usarlo más adelante. Te durará 3 meses. En general casi todo se puede congelar, pero si no tienes espacio lo mejor es ofrecer un tupper a cada comensal y que se lo lleven a casa.