Posiblemente hoy no has realizado tu rutina de ejercicios, sin embargo, seguro que estirarte ha sido lo primero que has hecho al despertar. Y es que esta acción tan sencilla, no solo es involuntaria y placentera, sino que además permite moverse con ligereza, oxigena el cerebro, previene el dolor muscular después de hacer ejercicio y mejora el rendimiento deportivo.
El estrés es la principal causa de las tensiones físicas
En momentos estresantes, ¿se te tensan los hombros y el cuello?, ¿tienes molestias en las lumbares? Pues eres una persona de lo más normal, ya que al estresarnos el cuerpo se inunda de adrenalina y cortisol, hormonas que aumentan el tono muscular y nos aportan más oxígeno para afrontar la situación de peligro.
El problema nace cuando esa tensión no se libera y se queda en el cuerpo contrayendo los músculos y desgastando el sistema nervioso. Entonces aparecen la tensión muscular y otros problemas: insomnio, migrañas, fatiga…
En este contexto, el cuerpo agradece que cada día dediquemos tiempo a estirarnos para mejorar el estado físico, calmar la mente y reequilibrar la energía.
Los beneficios de estirarse
Los estiramientos se traducen en puro bienestar. Resérvate siempre unos minutos para realizarlos antes y después de practicar ejercicio, ya que mejoran el efecto de la actividad corporal.
• Relajación y bienestar. Estirar resulta tan gratificante, entre otras razones, porque al hacerlo segregamos endorfinas, unas hormonas que producen sensación de felicidad y tienen un efecto analgésico natural. Estas sustancias químicas se liberan al comer, tener sexo, hacer ejercicio, bailar o realizar cualquier actividad que nos relaje y nos resulte placentera.
• Mejoran la circulación. El cuerpo aumenta el flujo sanguíneo hacia la zona que estiramos. Entonces, el corazón bombardea más sangre, los músculos reciben más oxígeno y se favorece la eliminación de toxinas.
• Previenen lesiones. Realizar estiramientos es uno de los mejores antídotos contra las lesiones, puesto que es una práctica que elonga los músculos y aumenta la flexibilidad y el rango de movimiento de las articulaciones.
• Más energía. No hay mejor remedio para el cansancio que unos buenos estiramientos, ya que favorecen la circulación sanguínea en todos los órganos del cuerpo y también en el cerebro.
Los estiramientos que te propongo son sencillos, no te robarán demasiado tiempo y te aportarán un buen número de beneficios físicos y mentales. Para que saques el mayor provecho de esta secuencia, recuerda respirar lenta y conscientemente, siempre por la nariz. No contengas el aire y utiliza las exhalaciones para liberarte de rigideces y molestias.
6 estiramientos para mejorar tu estado físico y mental