Las quemaduras solares son lesiones en la piel causadas por los rayos ultravioleta (UV) y pueden resultar muy molestas y hacer que la piel esté caliente, enrojecida, sensible y, en ocasiones, con picor.

Por lo general, si la quemaduras es leve o moderada, la piel se empieza a pelar unos días después de la quemadura y en aproximadamente una semana ya se habrá recuperado. No obstante, debes saber que la piel tiene memoria y la sobreexposición al sol y las quemaduras frecuentes aumentan el riesgo de cáncer de piel (incluyendo el melanoma) y pueden tener consecuencias en el aspecto de la piel, como la aparición de manchas cutáneas o arrugas permanentes. Si te quemas eventualmente, algunos remedios caseros pueden ayudarte a paliar las quemaduras de sol, aunque siempre que dudes sobre el estado de las quemaduras conviene consultar con un profesional. 

Remedios caseros para quemaduras de sol

Los remedios caseros para quemaduras de sol que verás a continuación pueden ayudarte a recuperarte antes de las quemaduras de sol o a reducir los síntomas, pero debes tener en cuenta que la mejor protección para tu piel es usar cremas protectoras con un factor de protección alto y evitar la exposición prolongada al sol (especialmente en las horas centrales del día).

1. Frío para aliviar las quemaduras solares

El frío proporciona un alivio inmediato de las molestias de las quemaduras solares puesto que ayuda a bajar la temperatura de la piel y reduce el calor "atrapado" en la zona afectada.

Aplicar frío provoca vasoconstricción, es decir, el estrechamiento de los vasos sanguíneos, algo que ayuda a reducir la inflamación, el enrojecimiento y la hinchazón y a minimizar la formación de ampollas. También tiene un efecto adormecedor, que puede aliviar temporalmente el dolor.

Puedes aplicar directamente agua fría del grifo sobre la zona afectada o compresas empapadas en agua fría. Evita el agua caliente, pues podría irritar aún más la piel.

2. Aloe vera, el mejor remedio para las quemaduras

El aloe vera es conocido, desde la antigüedad, como un auténtico milagro para la piel. Tiene propiedades humectantes, antiinflamatorias y regeneradoras de la piel, muy útiles frente a las quemaduras solares.

Tiene también un efecto refrescante natural en la piel, que puede ayudar a aliviar el calor y las molestias asociadas a las quemaduras solares.

Asimismo, el aloe vera forma una fina capa protectora sobre la piel que actúa como barrera y puede ayudar a proteger la piel quemada por el sol de irritantes, bacterias y otras sustancias perjudiciales.

Conviene usar el gel de aloe vera puro o productos que contengan un alto porcentaje de aloe vera y evitar aquellos que lleven ingredientes que pueden ser irritantes como perfumes o alcohol.

3. Baño de avena para calmar la piel quemada por el sol

La avena tiene propiedades antiinflamatorias gracias a unos compuestos llamados avenantramidas que pueden ayudar a reducir la inflamación y calmar la piel irritada.

La avena es un humectante natural y contiene sustancias (betaglucanos) que forman una capa protectora sobre la piel y ayuda a retener la humedad, calmar la piel, protegerla frente a irritantes externos y aliviar el picor.

También tiene propiedades limpiadoras, lo que permite eliminar suavemente la suciedad, el sudor y otras impurezas de la piel, sin causar más irritación o sequedad.

Para realizar un baño de avena, puedes usar avena coloidal o moler avena sin cocer hasta obtener un polvo fino y disolverlo en el agua del baño tibia. Sumérgete durante no más de 20 minutos y, a continuación, sécate la piel con suavidad.

4. Manzanilla, calmante natural para las quemaduras

La manzanilla o camomila tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación y el enrojecimiento de las quemaduras solares.

También posee un efecto humectante y refrescante natural de la piel, que alivia el calor y la sensación de ardor típico de las quemaduras, y compuestos como el bisabolol y el camazuleno, que favorecen la curación y cicatrización de la piel.

Puedes preparar una infusión de manzanilla, dejarla enfriar y empapar una compresa para aplicarla encima de las quemaduras. También existen cremas y lociones con camomila que pueden funcionar, aunque conviene asegurarse de que no contienen sustancias irritantes.

En algunas personas puede causar una reacción alérgica por lo que deberías probarlo primero en una zona pequeña para comprobar que no es tu caso.

6. Hidratación para la curación de las quemaduras solares

Si te has quemado, es muy importante una buena hidratación porque las quemaduras solares pueden deshidratar nuestro cuerpo y piel. Al quemarnos, el cuerpo pierde agua a través de la piel dañada, lo que aumenta la perdida de líquidos.

Además, beber mucha agua ayuda a mantener la piel hidratada de adentro hacia afuera y hace que sea menos probable que la piel se seque y se descame, lo que puede provocar molestias y picor.

Mantenerse bien hidratado es clave para el proceso de recuperación, puesto que el agua es esencial para los procesos celulares del cuerpo necesarios para reparar y regenerar las células de la piel dañadas por el sol.