La vaporización es una técnica sencilla y beneficiosa tanto para la salud como para los cuidados de belleza.

Se trata de baños de vapor que se aplican sobre la cabeza, el tórax e incluso en el cuerpo. Lo más habitual consiste en respirar los vapores que emanan del agua muy caliente.

Este simple vapor de agua es útil por sí mismo para descongestionar la mucosa respiratoria o abrir los poros de la piel para limpiarla mejor.

Pero los efectos son aún mayores si se incorporan al agua una o varias plantas, o ciertas sustancias medicinales, como pueden ser los aceites esenciales.

Baño de vapor para despejar las vías respiratorias

Los vapores cargados de principios activos actúan directamente cuando se aplican para cuidar el aparato respiratorio o la piel, o bien indirectamente en otra parte del organismo. Los vahos que te presentamos aquí combinan varios aceites esenciales que son adecuados para ayudarte a despejar las vías respiratorias, especialmente en caso de gripe, sinusitis y bronquitis.

Te contamos primero cómo hacerlo correctamente. Después encontrarás la receta.

Cómo hacer los vahos correctamente

Para realizar el baño de vapor correctamente hay que inclinarse sobre el recipiente y cubrirse la cabeza con una toalla, a fin que no haya penetración de aire frío.

Para la vaporización podemos utilizar un aparato llamado inhalador, o hacerlo con el clásico sistema casero: un recipiente (cuenco, cazuela...) en el que se verterán, calientes, el agua y la fórmula que te presentamos. Este procedimiento te servirá para cualquier vaho que hagas; simplemente vierte con el agua el producto elegido (plantas o aceite esencial) en vez de esta fórmula específica..

Proporciones para hacer el baño de vapor

La proporción de las plantas o aceites esenciales que pongas en el agua es importante. Aquí te damos la fórmula de aceites esenciales. Cuando se trata de aceites esenciales, hay que añadir unas 10 gotas por litro de agua

Si utilizas cualquier otra infusión, incorpora a un litro de agua hervida medio litro de la infusión ya preparada de plantas (eucalipto, manzanilla, lavanda, salvia, saúco, tusílago o malvavisco), o bien que el agua caliente entre en contacto con la planta dentro del cazo (unas tres cucharadas por litro).

Duración recomendada del baño de vapor

La inhalación, respirando con naturalidad, puede durar entre 5 y 10 minutos, dependiendo de la comodidad de la persona y del momento en que finalice la liberación de vapor.

Esta sesión puede repetirse hasta tres veces al día.

Receta para hacer los vahos contra la gripe, la sinusitis y la bronquitis

Durante dos semanas, y a razón de 2 o 3 inhalaciones diarias, hierve una cucharada sopera de la mezcla siguiente, que se habrá preparado con antelación (suficiente para 2 o 3 días):

Recuerda la proporción: añade 10 gotas de aceites esenciales por litro de agua que vayas a utilizar en los vahos.

Beneficios de los baños de vapor

Los vahos resultan muy útiles para combatir afecciones respiratorias como la bronquitis, la faringitis o la sinusitis, pues facilitan la eliminación de mucosidades y gérmenes, lo que ayuda a aliviar los síntomas y acelerar el proceso de curación.

Como ya hemos citado anteriormente, los vahos también limpian el cutis en profundidad. Para ello basta con hervir en agua unas ramas de tomillo y después inhalar el vapor durante diez minutos. El rostro quedará limpio y relajado.

Aunque los vahos son inocuos, deben tomarse ciertas precauciones como no quemarse (sucede más de lo que parece) ni respirar aire frío inmediatamente después de la inhalación.

Las personas alérgicas, como ciertos asmáticos, han de ser prudentes, sobre todo si utilizan aceites esenciales en sus inhalaciones.